Por Elba Cristina Parrales y Eddy López
Dos esculturas en forma de León dan la impresión que resguardan el diseño auténtico de la catedral de León, la más grande de Centroamérica.
Bautista Arríen expresa que el título que otorga la Unesco sirve para “dar a conocer la historia y la cultura de un país a través de sus monumentos y obras, que son considerados para la humanidad eslabones para ir construyendo una idea del recorrido de su historia”.
A nivel mundial existe una mayor proyección y a nivel nacional los locales logran tener mayor conocimiento de la historia.
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- Muchos la conocen como “La catedral de León o La basílica catedral de la Asunción de León”, pero su nombre oficial es Insigne y Real Basílica Catedral de la Asunción de la Bienaventurada Virgen María.
- Para Juan Bautista Arríen, secretario permanente de la Comisión Nacional de Unesco en Nicaragua, la catedral de León es como el centro, no solo de la ciudad, sino también el centro de la historia cultural.
Bajo las arcadas de la catedral reposan los restos mortales de 27 personas, entre ellos 10 obispos, 5 sacerdotes, un prócer de la independencia, tres poetas, un músico, seis notables y una esclava.
La catedral se distingue por tener una planta rectangular, de un tipo generalizado en aquellos siglos y semejante a los de las catedrales de Lima y el Cuzco. Tiene 5 naves, 10 tramos abovedados, 2 torres en su fachada y una parroquia. El sagrario está ubicado casi paralelo al altar mayor, cuyo saliente rompe la simetría rectangular. Su interior es espacioso y sus columnas cruciformes, su nave central se estaca por sobre las naves laterales y está rematada en el crucero por una gran cúpula.
En León Viejo tuvo los nombres de Nuestra Señora de la Piedad y Nuestra Señora de la Gracia.
El historiador Julio Valle Castillo, quien hizo una investigación sobre la catedral de León, afirma que se dio un período en Nicaragua, mientras se construía la catedral, que hubo escasez de huevo. “Fincas y granjas llevaban huevos a la catedral para que se mezclara cal podrida, clara de huevo, lodo y ladrillo cuarterón”, comenta el historiador.
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Tiene siete metros de profundidad que protegen a la planta mayor y las cuatro plantas laterales de las descargas y temblores.
En la terraza guarda el mayor espectáculo barroco que se combina con el estilo neoclásico.
Las ventanas son abovedadas y los dos campanarios tienen una cúpula chinesca.
La catedral de León no solo tiene valor histórico por ser la primer diócesis de la Iglesia en Nicaragua sino que es un baluarte nacional, pues allí están enterradas varias personalidades nicaragüenses, entre ellos Rubén Darío, Salomón de la Selva, Luis H. Debayle, Alfonso Cortés, el padre Marcelino Areas entre otros.
El diseño arquitectónico fue realizado por Diego José de Porres y Esquivel. Su construcción inició en 1747 y se consagró en 1825.
El historiador Julio Valle Castillo afirma que durante su construcción pasaron alrededor de diez obispos al mando de la catedral.
PROCESO DE NOMINACIÓN
Desde 2004 las autoridades culturales del país inscribieron en la lista de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y Cultura (Unesco) a la catedral de León para que se contemplara su declaración como Patrimonio de la Humanidad.
En 2006 inició la elaboración de un expediente que detallara los aspectos artísticos que hay dentro de la catedral y la historia de su construcción.
En 2007 vino por primera vez un representante de la Unesco para conocer y evaluar la conservación del edificio.
Las autoridades culturales trabajaron en función de las recomendaciones por parte de la Unesco. Siguiendo una de ellas reorganizaron el cableado que rodea el edificio.
En los principales hallazgos del diagnóstico que realizaron los delegados de patrimonio cultural de Nicaragua por parte del Instituto Nicaragüense de Cultura (INC), encontraron que tenían que hacer mejoras en la parte estructural, arquitectónica y de muebles, sistema eléctrico y bienes que tiene la catedral.
Según Vilma de la Rocha, directora del INC la Alcaldía de León ya está trabajando en pro de hacer las mejoras que necesitan realizar.
Luego de tanta espera, ayer en un comunicado de prensa, la Unesco informó que de manera unánime la catedral de León cumplía con los requisitos para ser declarada Patrimonio de la Humanidad.
MÁS PRESUPUESTO
El historiador Roberto Sánchez catalogó este hecho como extraordinario, pero a la vez advierte que es una responsabilidad para el Estado de Nicaragua y éste tiene que asumirla.
“Considero que la Asamblea Nacional debe destinar más presupuesto para la catedral de León. Pero a su vez los pobladores debemos cuidar ese patrimonio, empezando por quitar a los vendedores que están alrededor del edificio”, opina Sánchez.
Según Julio Valle Castillo, quien ayudó directamente a elaborar el diagnóstico de la catedral de León y que fue enviado al Comité Nacional de la Unesco, esta entidad recomendó que las calles laterales de la catedral fueran peatonales para evitar el movimiento y vibración del transporte y así no se deteriore el edificio.
La Unesco también aconsejó que el atrio que tiene tres accesos no fuera ocupado para ferias o ventas y que se pusieran barandas de hierro. Además, preservar el estilo si se realiza alguna reparación.
UN RECONOCIMIENTO A LA FE
Las autoridades de la iglesia católica fueron sorprendidas al conocer que la catedral de León fue inscrita en la lista del Patrimonio Mundial.
El obispo de la diócesis de León y Chinandega, monseñor Bosco Vivas Robelo, dijo que es un momento de alegría y de acción de gracias a Dios y además hizo un llamado a la diócesis de León para que cuiden a la catedral de León.
“Para mí es un reconocimiento que se le hace a la fe de todo un pueblo, es un pueblo que hizo posible esta construcción que ahora sea declarada patrimonio de la humanidad”, manifestó Robelo.
“Desde que vine a León, hace 20 años, ya se hablaba de esta nominación. Creo que nosotros tenemos 15 años de estar haciendo el esfuerzo y si se logró esto, ahora es el momento de darle gracias a Dios”, expresó Robelo.
Roger Gurdián, rector de la UNAN-León, dijo que para la universidad y los leoneses, significa un compromiso que tienen que asumir todos los leoneses y nicaragüenses.
“Esto significa mayor responsabilidad y retos para conservarla, para preservarla y sobre todo hacerla resplandecer en un entorno que es casco histórico de la ciudad de León, que es necesario rehabilitar. Nosotros necesitamos convertir a León en un destino turístico”, expresó Gurdián.
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