En las afueras de Taipei, capital de Taiwán, hay un pequeño rincón de Nicaragua. La bandera azul y blanco y artesanías de barro adornan las paredes, y el olor a café norteño se percibe desde que se cruza la puerta.
Un par de jóvenes taiwanesas vestidas con güipil reciben a los visitantes y ofrecen café segoviano.
En esa pequeña cafetería se degusta de forma gratuita el café nicaragüense de la mejor calidad, según explica Evans Chiang, quien junto a su hermano César, comercializa café nacional en Taiwán y China Continental.
Estos hermanos crearon dos empresas, una nicaragüense: Global Vision, que exporta el café a Taiwán; y la otra: Treasure Year, importadora del producto en la isla asiática.
Estos empresarios aprovechan el Tratado de Libre Comercio, que está vigente entre Nicaragua y Taiwán desde el 2008, para llevar hacia ese país café oro. Allá lo procesan y empacan para vender localmente y para exportar a la otra China.
Introducir el café nacional en Taiwán no ha sido fácil, acepta César, pues ahí no se conoce mucho el café nicaragüense, en comparación con el de Colombia, Brasil, Guatemala y Panamá.
Pese a esto, han intentado promoverlo vía internet y en ferias. Este fue el segundo año en que participaron en la Food Taipei —feria de referencia en Asia para la promoción de alimentos— en la cual, indicó, “más gente se mostró interesada en el café de Nicaragua”.
“La gente que lo prueba se da cuenta que el café de Nicaragua es de buena calidad, y no lo sabían”, comenta.
NICARAGUA, MÁS SEGURA
Los hermanos Chiang comercializan las variedades pacamara, maragogipe y caturra desde hace unos tres años, porque escucharon que “el café de Nicaragua es muy bueno”.
Luego de varias pruebas y visitas a productores decidieron iniciar el negocio, y aunque podrían encontrar producto similar en otros países de Centroamérica, prefieren el café nica por la seguridad que ofrece el país.
Afirman ofrecer el mejor café nica en todo Taiwán, pues otros importadores llevan café de zonas más bajas del país a la que ellos ofrecen, es por ello que lo venden a un mejor precio.
Una bolsa pequeña de café pacamara lo venden a 1,550 dólares taiwaneses (unos 55 dólares americanos), la de maragogipe la ofrecen a 1,350 dólares taiwaneses (unos 48 dólares americanos) y el caturra a 850 dólares taiwaneses, es decir, a unos 30 dólares americanos.
Pero, la gran mayoría del café que exportan de Nicaragua a Taiwán, se comercializa a China Continental sin procesar.
De los 12 contenedores de café que llevaron a Taiwán el año pasado, informaron, diez se vendieron a China y dos quedaron en Taiwán.
Pero, como la intención es promover más el café nica en la isla, trabajan en la promoción del mismo vía ferias. Además de la participación en la Food Taipei, cuentan, en noviembre próximo participarán en un evento especializado para café, vinos, licores y té.
Mientras continúan en la búsqueda de ampliar el mercado para el café nicaragüense, los hermanos Chiang empiezan a probar suerte con la importación de artesanías.
INTERESADOS EN LA CARNE NICA
Mayfull Foods Corporation es una empresa taiwanesa que afirma tener como prioridad la satisfacción de sus clientes, por lo cual no comercializan cualquier producto.
El fuerte de esta empresa es el negocio de la carne de res (86 por ciento de sus operaciones), y es la principal empresa importadora de carne nicaragüense en Taiwán.
El año pasado importaron 895 toneladas métricas de carne de bovino, un 45 por ciento del total de carne nica que se vende a ese mercado. Este año pretenden ascender sus compras a mil toneladas, y comprar así el 50 por ciento de la carne nacional que llega a la isla asiática.
Ellos compran a tres mataderos nacionales: Macesa, San Martín y Nuevo Carnic, pero continúan en la búsqueda de “un buen socio en Nicaragua para desarrollar el mercado de Taiwán”, según explica Hank Lee, gerente de la división de compras de Mayfull Foods Corporation.
Él explica que podrían comprar el producto a países vecinos como Honduras, Costa Rica o Panamá, pero quieren concentrarse en la carne nica porque satisface la demanda de calidad de esa empresa.
Pero, señala, los productores de carne en Nicaragua “podrían tratar de hacer un esfuerzo para promocionarlo mejor”.
Actualmente la carne nicaragüense ocupa apenas un dos por ciento de las importaciones totales de carne de bovino a Taiwán. Los mayores vendedores son Estados Unidos (38 por ciento), Australia (33 por ciento) y Nueva Zelanda (21 por ciento).
Jack K. T. Lee, gerente general de la empresa, informó que buscan desarrollar el mercado para carne refrigerada, pues la mayoría de la carne que importan es congelada, pero aún tienen inconvenientes con los suministradores de carne refrigerada, pues no ofrecen los volúmenes que demandan.
El problema, indica Hank Lee, es que los productores nicaragüenses siempre venden al mejor postor, dejando de lado el compromiso de venta, y Mayfull busca desarrollar exclusivamente el mercado para la carne nicaragüense, pero si los proveedores continúan incumpliendo, desistirían de este interés.
Andrés Tseng, representante de la empresa, cuenta que tienen ofertas de otros países de la región con los que Taiwán también tiene Tratado de Libre Comercio, pero quieren seguir siendo fieles a la carne nacional, afirma, por lo cual esperan que los suplidores mantengan el mismo grado de lealtad.
Este tema fue abordado por el embajador de Nicaragua en Taiwán, William Tapia, quien en declaraciones a LA PRENSA recomendó a los empresarios nicas a ser “más formales y cumplir con los pedidos que acuerdan”.
Mayfull Foods Corporation es una empresa con presencia en las principales ciudades de Taiwán, y con una red de más de ocho mil clientes en la isla, entre plantas procesadoras, supermercados, hoteles, mercados tradicionales y restaurantes.
Además de carne de bovino, importan de Nicaragua camarón de cultivo, café oro jinotegano y madera, aunque en volúmenes pequeños.
CHATARRA TAMBIÉN CON RETOS
La chatarra de hierro, uno de los productos que más se exporta a Taiwán también tiene muchos retos por vencer.
En lo que va del año, la exportación de chatarra de hierro y desperdicios de bronce, cobre y aluminio, han generado unos cuatro millones de dólares, según datos del gubernamental Centro de Trámites de las Exportaciones, Cetrex.
Levin Lin, subdirector de la empresa Join Enterprise, importadora de chatarra, comenta que la calidad de la chatarra que se vende hacia ese país no es la mejor, debido a la carencia de un sistema de acopio y selección adecuados.
Taiwán compra chatarra para producir acero y comercializarlo en el mercado local y otros países de Asia.
Lin cuenta que desde el 2009 incrementó el volumen de la oferta de chatarra de Nicaragua, pero con deficiencias. Actualmente importa entre 1,500 y 2000 toneladas métricas por mes.
“La calidad en general de la chatarra de Nicaragua no es tan buena si se compara con otros países. La clave está en que no hay un exportador (en Nicaragua) que organice y seleccione todo”, y ellos requieren que haya control de la calidad y el suministro.
Las empresas recolectoras de chatarra, indicó, prefieren vender el producto a Guatemala “que exportarla a mejor precio a Taiwán”.
Regularmente la chatarra que reciben es de electrodomésticos, techos, bicicletas, y similares, cuyo hierro tiene un valor bajo, pues se oxida con facilidad.
Lo ideal, indica, es la chatarra que se extrae de maquinarias industriales, a las cuales se les extrae mayor grado de hierro.
Para incrementar las exportaciones de chatarra, sugiere, debe instalarse en el país una empresa que acopie, seleccione y exporte el producto, garantizando así la mejor calidad del producto.
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