Por Edgard Rodríguez C.
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Durante más de dos décadas, Denis Martínez fue el vínculo entre Nicaragua y el beisbol de Grandes Ligas, pero un día como hoy en 1991, aseguró su perdurabilidad en el tiempo al lanzar Juego Perfecto 2-0 ante los Dodgers de Los Ángeles.
Martínez ejecutó su obra cumbre frente a 45,560 fanáticos en el Dodger Stadium y cubrió de gloria a Nicaragua, mientras captaba la atención del mundo deportivo, que descubrió en él una admirable historia.
Durante ocho años, Martínez había librado una fuerte batalla contra el alcoholismo y su Juego Perfecto fue como el premio a su esfuerzo por dar un giro a su vida y por recapturar el brillo en su carrera.
“Siento un enorme agradecimiento por ese regalo que Dios me dio a través del Juego Perfecto. Lo recuerdo como mucha alegría y espero que sirva para inspirar a otros jóvenes de lo que se puede lograr cuando se trabaja en serio”, dijo Martínez a LA PRENSA.
Martínez se mantiene como el único lanzador latinoamericano con un Juego Perfecto en la historia de las Grandes Ligas, cuya etapa moderna inició en 1900.
Antes de la hazaña de Martínez, la habían realizado otros 10 lanzadores, y 7 lo han hecho después, para un total de 18 en la historia.
