El compromiso de seguir respaldando a Fátima Hernández en su lucha por alcanzar justicia, hizo ayer Marcos Carmona, secretario ejecutivo de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH).
Carmona aseguró que tras la sentencia de la Corte suprema de Justicia (CSJ), el pasado 21 de julio pasado, que favorece al agresor de Hernández, Farington Reyes, esa organización no solo recurrirá a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sino ante otros organismos internacionales, que no especificó.
Hernández insistió ayer en su denuncia de amenazas a través del teléfono. Además, agregó que frente a su casa hay una movilización constante de vehículos sin placas. Hernández comentó que en las llamadas anónimas le advierten, “que no voy a llegar hasta diciembre”. O que lo que busca es publicidad, lo que Hernández negó.
“Yo no soy una delincuente para salir en carrera y meterme a mi casa, porque la verdad es que no he cometido ningún error, mi único pecado fue pedir justicia durante estos dos años, y quien se debe de ocultar y quien debe estar debajo de las rejas y debajo de una cama es otra persona”, manifestó Hernández.
Karla Sequeira, abogada de la CPDH, lamentó que el Ministerio Público haya cambiado su rol de representante de la víctima a defensor del victimario, con lo que se violentó el derecho al debido proceso como establece el código penal.
“Es de recordar al Ministerio Público su rol objetivo tiene que realizarse antes de llegar a los tribunales a interponer su acusación, después de presentada, su rol es ser representante de la víctima y no defensor (del agresor)”, aseguró Sequeira.
Sequeira señaló que las sentencias de los tribunales de justicia no pueden denigrar a la víctima y atacar su dignidad como pasó en este caso.
“Mantenemos que es una sentencia machista, sexista, violatoria a los derechos humanos de las nicaragüenses”, señaló la abogada de la CPDH.
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