NUEVA YORK/AFP
La Bolsa de Valores de Nueva York, animada después de un mes de pánico, enfrentará la semana siguiente una serie de incertidumbres importantes, con el paso del huracán Irene y con estadísticas económicas de primer orden en Estados Unidos, entre ellas las cifras mensuales de empleo.
“Es demasiado pronto para alegrarse, pero vemos claramente que una cierta confianza se reconstruye”, estimó Hugh Johnson, de Hugh Johnson Advisors.
Después de haber bajado durante cuatro semanas consecutivas, en las que perdió cerca de 15 por ciento de su valor, el principal índice de Wall Street al fin registró un alza.
El Dow Jones aumentó 4.32 por ciento en la semana que terminan el Nasdaq, con predominio tecnológico, subió 5.89 por ciento y el índice ampliado Standard & Poor’s 500 ganó 4.74 por ciento.
“Nos dimos cuenta que tal vez exageramos sobre los riesgos de una recesión. La baja fue tan exagerada que es normal que se registren alzas y que haya una estabilización a niveles más altos”, estimó Gregori Volokhine, de Meeschaert Capital Markets.
Los inversores pasaron la semana a la espera del discurso este viernes de Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).
Bernanke asegura que “las bases del crecimiento” siguen presentes en Estados Unidos y anunció que la reunión de la Fed en septiembre será prolongada a dos días, lo que fue traducido como un signo de vigilancia.
Ver en la versión impresa las páginas: 11 A