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Moisés Martínez, Gloria Picón y Elizabeth Romero
En la tarde de ese mismo día, la plana mayor de la ALN, con Enrique Quiñónez a la cabeza., brindaba una conferencia de prensa anunciando que Boitano quedaba fuera del partido porque supuestamente habría propuesto un plan para secuestrar a una hija del presidente Daniel Ortega.
Al día siguiente, Boitano fue detenido por agentes policiales. Su esposa Eugenia Valle asegura que la carceleada busca evitar que Boitano denuncie la venta del tendido electoral de ALN al Frente Sandinista.
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Álvaro Somoza Urcuyo, jefe de campaña de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN), afirma que no había denunciado al coronel en retiro Víctor Boitano inmediatamente después de los hechos ocurridos el 10 de agosto, porque no lo vio disparar y tampoco lo vio esconder el arma debajo del asiento de su camioneta, momentos después de los disparos que dejaron a un hombre paralítico.
Somoza mantiene que Boitano le dijo que había disparado y que se tenía que separar del arma. Señala que esa información la pasó a la Policía Nacional, sin embargo, ALN, durante las conferencias de prensa realizadas posterior al incidente dijo que habían sido agredidos y en todo momento negaron responsabilidad alguna.
El defensor de derechos humanos, Gonzalo Carrión, insistió en que uno de los delitos por los cuales fue acusado el coronel en retiro Víctor Boitano ameritaba otro tipo de medida cautelar a la prisión preventiva, pues de acuerdo con la ley no aparece entre los delitos graves. Cuestionó por qué la Policía no investigó en su momento si tenía información con relación a que Boitano había accionado un arma de fuego como refiere Álvaro Somoza en declaraciones de LA PRENSA de ayer.
“Hay varias cosas turbias (…) es una administración de aplicación de la ley mafiosa”, comentó Carrión.
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