AFP
La Casa Blanca expresó el lunes “su inquietud” en relación con la actual crisis política en Irak, en cuyo marco una orden de detención fue lanzada contra el vicepresidente Tarek al-Hachemi.
El portavoz de la Presidencia estadounidense, Jay Carney, afirmó que Estados Unidos había manifestado a Irak su “inquietud” respecto a la crisis, iniciada tras la partida de los últimos soldados estadounidenses estacionados en Irak.
Además, instó a todas las partes a “trabajar para resolver” sus divergencias “de manera pacífica, a través del diálogo, conforme al Estado de Derecho y al proceso político democrático”, agregó.
Según funcionarios de Seguridad y de Justicia, un comité judicial de cinco miembros emitió el lunes un pedido de captura contra Tarek al-Hachemi, en virtud de las “leyes antiterroristas”.
Este comité ya había prohibido a Hachemi viajar al extranjero, aunque fue luego autorizado a trasladarse al Kurdistán autónomo.
El anuncio del pedido de captura se produjo en momentos en que la televisión pública Al-Iraqiya mostraba imágenes correspondientes, según el ministerio del Interior, a guardaespaldas de Hachemi confesando haber planificado y cometido atentados y haber recibido fondos y el respaldo del vicepresidente.
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