Por quién doblan las campanas
“Nadie es una isla, completo en sí mismo; cada hombre es un pedazo de continente, una parte de la tierra; si el mar se lleva una porción de tierra, toda Europa queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia. La muerte de cualquier hombre me disminuye porque estoy ligado a la humanidad; por consiguiente nunca hagas preguntar por quién doblan las campanas: doblan por ti”. John Donne-1624
El título de la novela de Ernest Hemingway bien puede ser aplicado a nosotros, a Nicaragua entera. Doblan por mí, por ti, lloran por esa juventud masificada; por la juventud indiferente; por los empleados tanto del sector privado y especialmente del público; por los políticos que no quieren enfrentarse a la “dureza de la calle”; por la empresa privada y el Gran Capital que vela por sus intereses. Sí, también doblan por los Ortega Murillo y todo su séquito sin conciencia, ya que tarde o temprano la Ley de Gravitación Universal de Isaac Newton, de que “todo lo que sube tiene que bajar”, se les aplicará, y la historia ha demostrado que con los dictadores, esta ley es bien dura.
El 10 de enero del 2012 pasará a la historia como el día de la ignominia y de la traición. El día en que nuestra máxima expresión de honor, nuestro glorioso pendón bicolor fue mancillado al haber sido impuesto sobre un pecho indigno, ilegal y que sin el menor decoro lo aceptó para luego descartarlo dizque para ofrecérselo al pueblo. ¡Burla más grande! Él no me la dio a mí ni a ningún ciudadano nicaragüense. Pregúntenle al ciudadano común orteguista o no, si hoy enero 11 se siente Presidente de Nicaragua. ¡Por supuesto que no! El teatro bufo bajó el telón con un presidente ilegal de sonrisa soberbia y una primera dama ilegal bailando sin el menor signo de dignidad y respeto para el pueblo presente ni para las personalidades que los acompañaron no para legalizarlos sino por diplomacia (con exención de los tiranos de Venezuela e Irán, ni siguiera Cuba quiso cargar con ese estigma).
El tañer de campanas es doloroso, la Patria está herida pero no de muerte, nuestra Bandera debe permanecer a media asta con un negro crespón hasta que los vikingos del Norte, (no me refiero a los rubios del Continente Norte de nuestra América), del Sur y del Centro de nuestra Nicaragua o sea el pueblo entero recobren su dignidad y expulsen a los usurpadores, entonces las campanas no doblarán más por nosotros.
Milena Lanzas de Vega
La bancarrota alemanista
Un par de meses atrás, oyendo la canción En bancarrota , del cantautor Braulio, surgió la idea de hacer “un balance” del capital de votos que en el año 1996 recibió el doctor Arnoldo Alemán Lacayo y de la cantidad recibida el año pasado (2011). Pareciera que el pueblo nicaragüense “al final abrió los ojos” y dejó en bancarrota al candidato del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), y esto era de esperarse, pues Alemán, durante el período de validez del “pacto libero-orteguista”, dio todo, es decir “tiró a manos llenas sin pensar para acabar en bancarrota” y Daniel Ortega, ni corto ni perezoso, recibió todo sin tener la menor intención de dar reciprocidad a su parte contraria del citado pacto, y no es que el orteguismo haya incumplido totalmente con sus obligaciones pactistas, no.
Alemán recibió su exoneración judicial y mantuvo su pequeña porción participativa dentro del Estado, pero evidentemente, el pacto no llegaba hasta ahí, llegaría, según tengo entendido, a alternarse en el poder o, en todo caso, a dar al PLC la posición de segunda fuerza, pero ante la embestida de votos del candidato Fabio Gadea, el orteguismo olvidó a su compinche, dejándolo en el estado calamitoso de bancarrota.
Ante esta debacle alemanista, ¿qué le queda al doctor Alemán? La respuesta está en saber —como líder que fue, innegablemente— que el pueblo votante le ha dicho “No” y “bien claro de forma que lo entienda”, pues “el amor desaparece si es el mismo el que lo ofrece”, es decir, el pueblo ha visto que el doctor Alemán no devolvió de igual forma el amor que se le tuvo en 1996, por lo que el pueblo se pregunta: ¿Y qué has hecho de aquel hermoso capital que un día te diera? Qué poco lo has tardado en derrochar ¡y de qué manera!”, pero a la vez con dedo sentenciador lo conmina: “no vuelvas a girar sobre este amor que no responde, la cuenta que te abrí con ilusión ya está sin fondos”.
De tal manera que el doctor Alemán eligió mal al lanzarse como candidato presidencial a pesar de que él sabía que la cuenta “está por fin en números rojos”, y creyendo que el pueblo le daría un extrafinanciamiento “no se bajó del caballo”, continuó tirando a manos llenas y acabó, como se ha dicho en bancarrota. “Cómo lo siento sí, pero todo se agota, cómo lo siento sí qué mala nota”.
Rafael Arcángel Rodríguez Portillo
El día triste para Haydecita
Doña Haydée López cumplió sus 84 años en un día triste, sentada en las gradas de su casa, en donde todos los matagalpinos la saludaban. Ella es maestra de generaciones, la conocemos como la profesora Haydecita y recuerda con nostalgia cuando cursaba el último año de primaria en el colegio Santa Teresita y su amigo Carlos Fonseca Amador estaba en cuarto grado en la escuela superior de varones, religiosamente ambos estaban sentados en la famosa grada esperando la hora de viajar a sus respectivos centros de estudios.
Haydecita ¿vos creés que algún día yo pueda triunfar?, claro Carlitos y hasta podés llegar a presidente. Si Carlos viviera se muere de nuevo con solo ver lo desprestigiada que está la organización que fundó con tantos años de sacrificio. El pasado 10 de enero Haydecita ve en el cielo la gran tristeza como anunciando un cataclismo y no es para menos, porque ese día iniciamos una nueva patria sin ley, sin Constitución, sin democracia y casi sin futuro.
Ese fue el día más triste para la profesora, porque no pudo ver su telenovela porque la dictadura obligó a todos los canales a retransmitir la toma de posesión del inconstitucional presidente, pero lo que más le afligió fue el demagogo discurso del dictador, que parece creer que realmente fue legalmente electo por los votos, también causó tristeza ver al presidente iraní, como si fuera la rencarnación de Adolfo Hitler. Realmente fue un día triste.
Leopoldo Villalta López
Natalicio de Darío
El próximo miércoles 18 de enero se celebrará los 148 años del natalicio de nuestro universal Príncipe de las Letras Castellanas, Félix Rubén García Sarmiento (Rubén Darío).
Razón por la cual, los darianos de Nicaragua y otros países de la tierra no pasarán por inadvertida esta interesante fecha en la que vino al mundo este consagrado poeta y escritor; quien con su precioso trabajo literario también se convirtió en un profeta dentro y fuera de su tierra, como gran genio que servirá de enseñanza siempre para todas las generaciones; porque el pensamiento de Rubén Darío es infinito y su gloria es inmortal.
Salvador Pérez González
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