Me refiero al Banco Nacional de Nicaragua (BNN), que fue constituido el 3 de enero de 1912 y comenzó sus operaciones en agosto del mismo año.
El gobierno contrató los servicios del técnico chileno doctor Hermann Max y elaboró lo siguiente: 1) Proyecto de Ley del Banco Nacional de Nicaragua, 2) Proyecto de Ley General de Instituciones Bancarias 3) Proyecto de ley que reorganizaba la Compañía Mercantil de Ultramar y leyes que reorganizaba el Control de Cambios, la ley monetaria, etc.
Del Banco Nacional salieron los mejores ejecutivos que fueron a formar otros bancos. También de él salió el primer presidente fundador del Banco Central de Nicaragua, doctor Francisco J. Laínez, y el Instituto de Comercio Exterior e Interior (INCEI). El BNN creó el Departamento de Crédito Rural, que apoyó al pequeño agricultor. Entre los presidentes del banco, se destacó don Federico Lang y como gerente general se distinguió don Alfredo Cole.
También debemos recordar a funcionarios de gran prestigio, como don Alejandro Burgos, doctor José Ernesto Somarriba, ingeniero Roberto Rodríguez, doctor Alfredo Papi Gil, don Manuel Vanegas, licenciado Jorge Alaniz Orozco, don Carlos López Solís, y muchos más. El BNN fue el medio para que muchos pequeños agricultores crecieran y se convirtieran en usuarios del crédito bancario designado para grandes productores.
El BNN financiaba todos los rubros, incluyendo la construcción de viviendas en sus finquitas a los pequeños agricultores, con el apoyo de los recursos del Banco Interamericano de Desarrollo. Trajo una misión israelita para trabajar en proyectos de riego, otra misión de Argentina llamada Latinoconsult, para brindar asistencia técnica a los ganaderos del país. Tenía todos los servicios bancarios, como cuentas corrientes, cuentas de ahorro, depósitos a la vista y a plazo fijo, cartas de crédito, etc. Financió hasta 320,000 manzanas de algodón y 380,000 manzanas de granos básicos. Pasaron años antes que lo comenzaran a quebrar los depredadores de la década de los ochenta. 248 ingenieros agrónomos le proporcionaban asistencia técnica a los pequeños productores agropecuarios. El BNN existió 85 años y siete meses y fue clausurado porque al cambiarle el nombre original y ponerle Banco de Desarrollo, su nueva misión consistió en dar créditos sin recuperarlos por la alta politización. Según el BID, el Crédito Rural del Banco Nacional fue uno de los dos mejores programas de crédito agrícola al pequeño agricultor en América Latina.
Estoy convencidos que no volverá a existir otro banco nacional con todas las cualidades de aquel BNN, ni la disposición institucional o estatal, para reponer totalmente el banco que quebraron los ignorantes que gobernaron durante la década pérdida. El simulacro de banco actual está superado por la politización propagandística al estilo de Goebbels.
El autor es cooperativista, fue funcionario del BNN.
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