Por Josué Bravo
Corresponsal/Costa Rica
La idea de construir un parque ambiental en Isla Calero, una isla continental costarricense que limita al norte con Harbour Head y la cual no está en disputa con Nicaragua; ha generado discrepancias internas. La diputada opositora Mireya Zamora, lidera un movimiento contra el proyecto.
La diputada del Movimiento Libertario, denunció que de transformar a Calero en un parque ambiental, afectaría a las familias que ahí habitan, lo cual ha sido desmentido por el excanciller y ministro de Ambiente, René Castro.
“Nosotros somos víctimas de una dictadura ambiental. Los extremistas ambientales han puesto la protección de la naturaleza por encima del bienestar de las personas que habitamos esa zona. Nosotros somos los herederos de los caídos en la campaña de 1856”, dijo el dirigente comunal de la zona norte, William Mejía, quien forma parte del movimiento que lidera Zamora.
Castro descartó que en Calero hayan habitantes que puedan resultar perjudicados, aunque reconoció que la conversión en parque de la isla de más de 15 mil hectáreas, aún está pendiente de estudios técnicos que avalen el proyecto.
Donde aseguró que habían habitantes es en la zona de Harbour Head, que Costa Rica le llama isla Portillos y le reclama a Nicaragua. Aunque Castro no lo mencionó, ahí vivía la familia nicaraguense Reyes Aragón, la cual denunció una supuesta invasión del Ejército de Nicaragua y a quien las autoridades nicaragüenses vinculan con actos ilícitos.
La idea del parque nacional surge a raíz del conflicto fronterizo con Nicaragua. Castro y la mandataria Laura Chinchilla, juramentaron a un grupo de bomberos ambientales que mitigarán los efectos ambientales por la construcción de la carretera tica paralela al río San Juan. Los bomberos sembrarán árboles, estabilizarán paredones y harán mantenimiento de alcantarillas.