Managua/ACAN-EFE
Un grupo de retirados del Ejército, que resultaron heridos en un enfrentamiento con la Policía Nacional la semana pasada, cuando exigían en una protesta beneficios sociales al Estado, se declararon hoy “perseguidos políticos” y “dispuestos a ir a una lucha”.
Carlos Ramírez, presidente del movimiento de exmilitares, llamado Consejo Nacional de Defensores de la Patria “Camilo Ortega”, denunció hoy al Gobierno de Daniel Ortega por supuestamente cometer persecución política contra los desmovilizados que desde febrero han protestado en distintas zonas del país.
“Hoy nos sentimos como perseguidos políticos por nuestro propio gobierno y consideramos que no es la actitud”, señaló Ramírez, al acusar al Ejecutivo ante el no gubernamental Centro Nicaragüense de los Derechos Humanos (Cenidh).
El líder de los desmovilizados anunció que elevarán el caso ante la Justicia. Ramírez explicó que en el choque con piedras, petardos y cuerpo a cuerpo, ocurrido el pasado jueves cerca del Aeropuerto Internacional de Managua, agentes antidisturbios de la Policía golpearon a unos 60 exmilitares, hirieron a 30 y arrestaron a 10, quienes ya están en libertad.
“Es una lástima que la sangre nuestra haya corrido por las calles de Managua”, indicó Ramírez, quien advirtió: “Si nosotros hubiésemos querido guerra, no solo la sangre de nosotros hubiera corrido”.
Los militares retirados, que desde febrero pasado han efectuado nueve protestas en distintos puntos del país, exigen al Estado parcelas de tierra para cada uno, títulos de propiedad, atención médica especializada y pensiones vitalicias y por discapacidad.
Según Ramírez, el pasado 15 de marzo los desmovilizados firmaron un acuerdo con una comisión gubernamental, pero el Ejecutivo no había cumplido, por lo que los exmilitares se sienten “burlados”.
El pasado fin de semana, añadió, dirigentes de la organización celebraron asambleas con unos 800 delegados en las norteñas provincias de Jinotega y Matagalpa, donde se declararon “dispuestos a irse a la lucha y que esto llegue hasta donde tenga que llegar”.
Además, adelantó que podrían declararse en huelga de hambre o continuar interrumpiendo el tráfico en las principales carreteras de Nicaragua.
El Consejo Nacional de Defensores de la Patria “Camilo Ortega”, bautizado así en honor a un hermano del presidente incostitucional Ortega, quien falleció en 1978 durante la insurrección contra la dinastía de los Somoza, exigió al Ejecutivo comenzar negociaciones a más tardar el viernes de esta semana, o de lo contrario retomarán sus protestas.
Ortega no se ha referido al asunto, pese a que en la década de los ochenta del siglo pasado, cuando gobernó por primera vez Nicaragua, los ahora reclamantes pertenecían al extinto Ejército Popular Sandinista (EPS), que combatió con las armas a la Resistencia Nicaragüense, conocida como la “Contra” y financiada por Estados Unidos.