El Titanic tiene un museo. Está en la ciudad de Belfast, capital de Irlanda del Norte. Situado en la misma zona portuaria en que el mítico crucero fue construido, en 1911. Se llama “Titanic Belfast” y desde su inauguración, el pasado 31 de marzo, ha recibido unas 125 mil visitas.
El museo muestra cada rincón, historia, magia, leyenda y trayectoria del emblemático transatlántico. Desde su construcción en los astilleros norirlandeses hasta su hundimiento al chocar con un iceberg el 15 de abril de 1912 y las exploraciones marítimas que poco a poco han revelado los restos del naufragio.
No espere ver vejestorios. No hay artefactos procedentes del fondo del mar, siguiendo la voluntad del descubridor del casco del Titanic, Robert Ballard. Sin embargo, el “Titanic Belfast” consigue recrear la experiencia del naufragio mediante actividades interactivas y documentos históricos.
Aparte de ese moderno centro multimedia, la exploración del Titanic se completa con un tour guiado por las auténticas oficinas donde se diseñó el barco y los astilleros donde se construyó, antes de zarpar en su primero y fatídico viaje desde el puerto inglés de Southampton, cuando se creía que nada lo podría hundir.
La construcción del complejo costó 97 millones de libras esterlinas (154 millones de dólares). En él alcanzan más de 3,547 visitantes a la vez (ese es el número de personas que iban a bordo en aquel primero y último viaje), y es uno de los mayores atractivos turísticos de la ciudad portuaria.
Hasta el momento, turistas de 20 países han llegado a soñar con el legendario crucero, y se espera que pronto el museo esté recibiendo unos 400 mil visitantes al año, según Alex McGreevy, director de comunicaciones.
Gracias a la tecnología 3D el turista puede hacerse una idea de cómo era caminar por los lujosos corredores del Titanic. Incluso puede contemplar detalles de las cabinas, el diseño de los muebles y la tapicería.
Si se decide a invertir en un viaje al pasado, que le hará sentir como si en verdad subiera a bordo del legendario crucero, tenga en cuenta que en Irlanda del Norte se usa la libra esterlina (una libra esterlina equivale a un dólar con 56 centavos).
Julio es el mes más cálido; febrero, el más frío. Llueve todo el año, pero con más frecuencia de agosto a enero. Asegúrese de conseguir un paraguas.
Ver en la versión impresa las paginas: 17