El estereotipo de una habitación masculina es un espacio desordenado, cosas tiradas por un lado y otro, sin embargo muchas veces estamos equivocados.
En el pasado quedó la creencia de que decorar el espacio en el que se habita es solo un tema para las mujeres. Hoy en día, muchos hombres que viven solos e incluso quienes conviven con su familia se preocupan por ambientar la casa para que esta se convierta en una fiel muestra de su personalidad.
Un arma importante es contar con un espacio para su ropa. Los armarios o roperos son fundamental en una habitación, ya que ayuda a que todo esté en orden y en su lugar.
Los materiales de los armarios pueden variar, según el gusto del cliente, pero entre los más usados están los armarios de concreto y madera.
Es necesario que estos espacios tengan sus debidos depósitos. Una técnica es ubicar las piezas por colores, es decir todas las camisas rojas juntas.
Este armario también debe de contar con un lugar para los zapatos.
Ver en la versión impresa las páginas: 4 B