Wilder Pérez R.
Todavía tiene 20 años para decidirse, mientras crecen las plantas sembradas ahora mismo. No obstante, pretende aprovechar su tecnología de punta en producción forestal para producir chocolate de alta calidad.
Róger Román, responsable del proyecto, aseguró que las condiciones de la RAAN propician la siembra de cacao fino, el que convertirían en un manjar.
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Según el Instituto Nacional Forestal (Inafor), el ritmo de deforestación en Nicaragua bajó en diez mil hectáreas durante los últimos años, gracias en parte al esfuerzo del sector privado.
Los habitantes de Waspado, en Siuna, están siendo testigos de esto en la Región Autónoma Atlántico Norte (RAAN). En estos días un batallón de más de 400 personas trabaja para recobrar la cobertura forestal a pocos kilómetros de la zona núcleo de la Reserva de Biosfera Bosawas.
Ellos están reforestando un área que antes eran pastizales frente al Saslaya, el cerro que le dio la segunda sílaba al Bosawas.
El proyecto llamado Javier Chamorro Mora está destinado a ser un éxito, ya que es una de las ramas de inversión de la empresa minera Hemco.
Róger Román, gerente del proyecto de Hemco Forestal, confirmó que se trata de un negocio, pero que el impacto en el medioambiente va de la mano con las ganancias económicas.
Si bien no hay nada más valioso que el oro, Hemco apuesta por una industria capaz de dar más de 100 mil dólares por manzana, con la ventaja de que ofrece empleo y ayuda a la conectividad de las especies, ya que formará parte del corredor biológico mesoamericano.
La meta a largo plazo es sembrar 10,000 manzanas en los próximos 20 años.
El monocultivo es uno de los temores frente a la industria maderera. Román afirmó que podrían superar el 20 por ciento de plantas nativas que exige la Ley.
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