Amír Or
Tres cocineros sacan las vísceras,lo rellenan con camarones y hongos. Necesitaron dos yemas de huevos,una botella de vino blanco seco,veinte dientes de ajo,sal, pimienta, hierbas, 500 gramos de mantequilla a pesar de la receta exacta que él dejó y no un poco de talento e improvisación.Tres horas en el horno,un mantel blanco, velas rojas, ensalada verde, champaña. ¿Qué puedo decir? Liberó la lengua y prohibió la apología tal como en vida, él fue carne y sangre, muerto y delicioso y amado.
Traducción de Karla Coreas
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