Génesis Hernández Núñez
Madera de granadillo para tableros de autos de lujo en China continental, chía y cardamomo enviados a Taiwán, banano y café exportados a Dubai y próximamente negocios con Ghana, son parte de los logros de Tropicana Fruit Farms Inc., una empresa nicaragüense que emplea a diez personas de forma directa y a 40 de manera indirecta.
Un inversionista iraní y Leonel Ortiz fundaron el negocio, que inició operaciones en el 2007, año en el que exportaron 25 contenedores de piña de Ticuantepe a una cadena de supermercados de Los Ángeles, Estados Unidos y a Dubai.
En el 2008 exportaron banano y café del departamento de Jinotega a Estados Unidos y a finales de 2009 el mercado se expandió hacia China continental.
La fluidez de los negocios también tuvo relación con la maestría en libre comercio que Ortiz realizó en Taiwán, donde pudo establecer contacto con asiáticos. “Tuve compañeros de clase de Japón y de China Continental, vimos el nicho de mercado, cuando regresé al país me asocié con un chino nicaragüense y funcionó”, cuenta el empresario.
Changlin Gao, socio chino de Ortiz, fue quien organizó los contactos internacionales y de esa forma Tropicana Fruit Farms Inc. ha podido enviar madera de granadillo a cinco puertos de China continental: en 2011 exportaron 125 contenedores logrando ventas de 115,000 dólares y este año han enviado 20 contenedores que viajan por barco durante 35 días hasta llegar a su destino.
Esta madera es usada por las marcas de autos de lujo Audi y Mercedes Benz, para decorar los tableros y parte interna de las puertas de los vehículos, además se utiliza para decoración de casas y elaboración de muebles.
Uno de los compradores es la marca Yamaha, “ellos han dicho que es un producto muy sólido y de alta calidad por la altura del lugar donde se produce y por las condiciones agroecológicas, además según análisis que han realizado, las guitarras dan un excelente sonido, un tono particular que se destaca entre los otros países de donde también importan madera”, explica Ortiz.
[/doap_box][doap_box title=”Limitaciones de la piña de Bluefields” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
“Sin embargo, un lugar que tiene una piña rica y dulce es Bluefields, pero no podemos exportarla porque se nos aumentan los costos, además hay poca producción y tendríamos que poner en marcha un plan de tres años para poder tener suficiente volumen para exportar”, explica.
[/doap_box]
EL COMERCIO CON TAIWÁN
Pero la expansión de Tropicana Fruit Farms Inc. no se quedó ahí. Luego Ortiz y Gao empezaron a exportar miel de abeja en pequeña escala a Taiwán y este año que Leonel participó en la feria Food Taipei, logró pedidos de chía y cardamomo por parte de un cliente que abastece tiendas de productos naturales. Actualmente es en ese país que están enfocados los esfuerzos porque, “además de brindarnos oportunidades, Taiwán es el puente para llegar a China, Japón e incluso a la India y hemos generado confianza con ellos, que son muy responsables, éticos y profesionales en sus negocios”, explica Leonel.
De igual forma el comercio a Taiwán se facilita porque los productos nicas ingresan exonerados de impuestos por el Tratado de Libre Comercio que está vigente con ese país desde el 2008.
FALTA VALOR AGREGADO
A pesar que son de calidad de exportación, los productos que Tropicana envía a Asia no tienen el suficiente valor agregado; hasta la chía y el cardamomo son enviados en bolsas plásticas transparentes y sacos de bramante, para luego ser empacados en el país de destino para su distribución, ya que “Nicaragua no cuenta con maquinaria para fabricar empaques”, según el gerente de Tropicana Fruit Farms Inc.
La labor de la empresa también depende mucho de las alianzas que han establecido con los productores, para conocer su capacidad de abastecimiento y llegar a un acuerdo en cuanto al precio. “Nosotros financiamos la producción y en la medida que ellos la van obteniendo, nos la van entregando”, explica Ortiz. Esto sucede con la madera, la piña, la chía, el banano y el café.
De igual forma, realizan trabajo con las alcaldías de los lugares de donde obtienen productos, por ejemplo la de Jinotega, Estelí, Matagalpa, Rivas y Bluefields.
Lo más complicado para Ortiz y Gao ha sido conseguir compradores, porque debido a la distancia nadie quiere enviar dinero, la empresa aún no tiene capacidad para el volumen que requieren los clientes. Por ejemplo, de chía solo envían tres o cuatro pedidos al año, pues solo se produce en los departamentos de Estelí y Matagalpa.
El caso de la madera también es muy complejo, Leonel cuenta: “Nos persigue la Policía, el Instituto Nacional Forestal, Inafor, el Ejército, creyendo que es ilegal y no se podría exportar si no llenara todos los requisitos, porque ni la aduana lo dejaría salir y además estamos certificados por el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales Nicaragua (Marena), Inafor y Cites de Nicaragua que regula especies en extinción”.
El Ministerio Agropecuario y Forestal (Magfor) también los ha certificado y les permite exportar siempre y cuando los productos llenen todos los requisitos fitosanitarios, por ejemplo las frutas no pueden llevar ningún rastro de insecticida, para esto se les realiza un análisis especial en León y luego otro en el país de destino.
INTERACCIÓN CON LOS CLIENTES
En junio Ortiz participó en la Feria Internacional de Alimentos Food Taipei 2012, y cuenta que “en seis días que duró la feria, además de intercambiar contactos con las empresas interesadas en nuestros productos, les pedimos visitar sus compañías y así establecemos una buena relación que luego se continúa vía internet”. En esta ocasión Ortiz hizo contacto con 27 compañías no solo de Taiwán, sino también de Japón, China continental, India, Rusia, Ghana.
Durante la feria, una de las empresas con las que se contactó fue Best Sunshine Co. Ltd., que fabrica luminarias para alumbrado público que funcionan con luz solar. “Les llamó mucho la atención Tropicana Fruit Farms Inc. y creo que seremos sus representantes no solo para Nicaragua sino también para Centroamérica”, cuenta el empresario.
Leonel estudió Mecanización Agrícola, Administración Agropecuaria y Administración de Empresas y ha realizado posgrados en Italia, Estados Unidos y Taiwán. “Ha sido un gran esfuerzo, recuerdo cuando estaba estudiando en Estados Unidos, tenía compañeros chinos, japoneses, que salían a pasear mientras yo me quedaba estudiando, porque soñaba con triunfar y realmente cuando uno se pone metas, lo logra”.
Ortiz viajará a Ghana en los próximos meses para negociar con inversionistas privados apoyo para la agroindustria de Nicaragua.
Ver en la versión impresa las páginas: 4 C