Candidatos sin rostros
Vamos a una nueva campaña electoral, aunque ahora todas son iguales, son peleas de tigre suelto con burro amarrado. Solamente cambian algunas tácticas, la estrategia es la misma: tener un Consejo Supremo Electoral comprado con dinero del presupuesto de la República y convertido por sí y ante sí en el gran elector, con Roberto Rivas a la cabeza de la operación.
Pero una novedad en esta campaña es que los candidatos de Alianza Unida Nicaragua Triunfa encabezada por el FSLN, que según parece solamente es él y el partido somocista PLN, lleva candidatos sin nombres y sin rostros, anónimos. Los mismos miembros del partido no saben quiénes son los candidatos, fueron escogidos en secreto por los pequeños copuladores del partido entre sus amigos y familiares y solamente ahora se han empezado a conocer sus nombres, a través de asambleas por invitación y reuniones de allegados y empleados públicos.
Es una novedad porque conocíamos de jueces, testigos y policías sin rostro o encapuchados, que utilizan este procedimiento para protegerse debido a que se enfrentan con la delincuencia. Pero que un candidato a alcalde o concejal que se dice aspira a representar a la ciudadanía y que supuestamente necesita su voto ¿por qué razón tendría que ser anónimo?
La justificación de este extraño modo de hacer política es que la población no vota por el candidato, por la persona, por sus capacidades, ni cualidades, si no por el FSLN, viejo pregón de la vieja ideología comunista que trata de invisibilizar a todos, menos al gran líder, y que los coreanos, chinos y cubanos han practicado de manera disciplinada y criminal, quitándoles los derechos a los demás por las buenas o por la malas.
Por eso cuando llegan las elecciones nacionales es al revés. Allí es la figura del gran líder la que cuenta, es él el que llevará al partido a la victoria. El partido no es nada, el gran líder es todo. Allí no importa que los partidos sean o deban ser instituciones que ofertan un programa político de largo plazo, que se hará realidad en varias administraciones, no importando las personas que ejerzan el cargo. En las nacionales hay que hacer todo: violar la Constitución, robarse las elecciones, hacer una guerra civil, matar mujeres embarazadas, niños o lo que sea, para que el gran líder siga siendo presidente o primer ministro ¡Cuanta basura ideológica!
Eduardo Cáceres
Reforma curricular en la Educación Superior
Ahora que el CNU y representantes del Gobierno central han admitido la necesidad de una reforma curricular en la educación superior, obliga al MED realizar ajustes y revisiones para una oportunidad histórica en Nicaragua. Algunos estudiosos nacionales iguales que la Unesco consideran que todos los subsistemas educativos deben educar para:
1- Formar valores; tarea esencial del proceso educativo, de ella depende que el niño de hoy se convierta en ciudadano de bien; en profesionales, técnicos y obreros solidarios con su familia y su comunidad. Valores que tengan como ejes los derechos humanos, el tema del género, la protección del medioambiente, el respeto por las ideas ajenas, la paz personal, la comprensión internacional y el amor al trabajo y a las personas.
2- Desarrollar conocimientos útiles, científicos y técnicos; conocimientos para razonar, para resolver problemas, para crecer internamente. Conocimientos relevantes, importantes y pertinentes, con aprender para la vida; el conocimiento como realización de un ser humano que depende de su capacidad para comprender y adaptarse al mundo que lo rodea y a su mundo interno, conocimiento para la buena comunicación con palabras agradables, alegres, de cariño y de amor. Para encontrar nuevos conocimientos, procesarlos e interiorizarlos.
3- Preparar para la participación; hacer uso del derecho a participar en las decisiones que toman las autoridades y que afectan su vida. No la indiferencia, ni el miedo a hablar y participar; preparar para influir y mejorar los partidos políticos, los programas públicos y a los actores que toman decisiones a niveles nacional y local a ser miembros de una asociación en grupos culturales, religiosos, recreativos. Nada de individualismo egoísta e insensible, la soberanía reside en la participación del pueblo.
4- Formar para el trabajo. Del trabajo se debe derivar no solo el sustento, sino la certeza de ser útil y necesario; y de la seguridad de ocupar un lugar propio en este país y en esta época. Como trabajador tener como visión constructiva y positiva del momento histórico y las demandas laborales como obrero calificado como técnico básico medio o superior; como especialistas en refinerías, puertos y puentes; especialistas y trabajadores en procesos industriales de la carne, del café, frijoles, plantas; en procesos de nuevos equipos tecnológicos, de sistema de comunicaciones y moderna red ferroviarias.
Las empresas nacionales y extranjeras necesitan obreros y técnicos clasificados y ven a nuestros egresados universitarios carentes de habilidades y capacidades para los cargos, empezando por el manejo de un idioma extranjero y de la tecnología de la información.
Nicaragua aún es una nación de niños y adolescentes, pero esta situación ha comenzado a cambiar: los niños han comenzado a disminuir y en jóvenes aumenta y dentro de 30 y 40 años empezaremos a envejecer notoriamente. Es una obligación y una responsabilidad histórica atender laboralmente a los jóvenes y adultos en capacitaciones, oficios y profesiones.
Salvador Ampié Calero.
Consultor.
Viejo y noble DC-3
Cada mes de octubre, sobre todo los 3, recuerdo el día que apoyando a los contras en la guerra tan desigual que emprendimos para buscar la libertad de Nicaragua que acosada por el totalitarismo de una dictadura izquierdista, hoy disfrazada de cristiana socialista y solidaria, en esa fecha fue derribado el primer avión de la Contra, un viejo pero noble DC-3 que ya había visto otras batallas y surcado otros cielos.
Recientemente vi una foto de parte de este avión que sirve como recipiente de agua en las cercanías de Río Blanco donde fuimos derribados. También por allí están dos tumbas clandestinas de dos de los tripulantes que fueron asesinados por nuestros captores.
Muchos nicaragüenses quedaron en esas montañas luchando por esa patria que a pesar de tanta sangre derramada pareciera que no fuera suficiente para los que la han llevado por ese camino, promesas de hacer un ejército más poderoso y de construir más cárceles, de que los militares dominen las instituciones civiles como pasa en todos los poderes, que se siga violando nuestra Carta Magna, ignorar la necesidad de respeto a todo lo anterior sin siquiera dar muestras de enmienda, todo lo contrario a diario siguen las violaciones y los deseos de burlarse de la voluntad popular, seguir en el robo descarado de cuanta elección se haga, con eso están edificando los peldaños que nos llevó a otra guerra, algo que nadie que haya participado en ella y que dejó sus secuelas quiere.
Jamás han sido entregados los cuerpos de centenares de contras caídos por la patria menos los de varios tripulantes de la Fuerza Aérea del FDN, Río San Juan, Planes de Vilán, El Cedro, Santa Clara, son algunos de los lugares donde se encuentran las tumbas de nuestros hermanos que cayeron por esa patria amada.
Roberto Amador N.
Oficiales honestos
El 22 de septiembre de este año, viajé a La Libertad, Chontales, donde su carretera esta adoquinada. Pero como mi destino era hasta el Monasterio de Santa María de La Paz, tenía que pasar por un camino de tierra, pero como mi vehículo es muy bajo no pude pasar por los charcos y pegaderos que se forman cuando llueve.
Personas del lugar me dijeron que tenía que dejar mi carro en el pueblo y seguir en uno público, pero como no conozco a nadie y además ni siquiera existe una gasolinera en ese pueblo, lo único que se me ocurrió fue ir a la estación de Policía, donde los oficiales de turno me atendieron amablemente y me dieron un lugar en su estacionamiento para que dejara mi vehículo por un día, sin cobrarme un centavo.
Por eso desde estas páginas de LA PRENSA les envío mi agradecimiento a la Policía Nacional de La Libertad y a todos los oficiales honestos, que gracias a Dios, todavía quedan en Nicaragua.
María José Pérez Villalta
Ver en la versión impresa las páginas: 11 A
