Wilih Narváez y Juan Tijerino
En un intento por desalojar a un grupo de tomatierras que se resiste a abandonar una finca de 11 manzanas que pertenece a una orden religiosa, ayer un alto jefe de la Policía Nacional resultó gravemente herido.
Se trata del comisionado mayor Pablo Emilio Ávalos, segundo jefe departamental de Managua, quien fue sometido a una cirugía en el hospital de la Policía, Carlos Roberto Huembes.
Este hecho se registró poco después de las 10:30 a.m., cuando Ávalos acompañado de varios agentes llegó hasta el reparto San Francisco, en Tipitapa, para desalojar a los precaristas que en un primer momento se presentaron como supuestos miembros de los Consejos del Poder Ciudadano (CPC).
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Pero los ciudadanos al ver llegar a los agentes se armaron con piedras, palos y machetes para atacarlos. En el enfrentamiento el comisionado Ávalos resultó con lesiones graves en el rostro, por lo que fue trasladado en una patrulla policial al “hospitalito” Yolanda Mayorga, de Tipitapa y luego transferido al Hospital Carlos Roberto Huembes.
En tanto el resto de las fuerzas retornó a la estación policial, para posteriormente regresar en un bus repleto con agentes de la Dirección de Operaciones Especiales (DOEP), los que no entraron en acción.
Este intento de desalojo se dio un día después que LA PRENSA publicara una nota donde las monjas expusieron su situación.
FINCA OCUPADA
La situación no varió, ya que al final del día la propiedad de 11 manzanas que inscribieron como la finca 73768, tomo 1258, folios 113 y 114, del Registro de la Propiedad, continuaba en poder de los tomatierra, quienes culparon a la Policía por lo sucedido.
“Estábamos tranquilos, pero la Policía vino y trató de derribar una casa de una mujer embarazada. Cuatro policías la agarraron por la fuerza y la golpearon, por eso es que se dio el pleito”, señaló Félix Rivera.
Rosa Martínez , una de las tantas personas que ayer evitó que se efectuara con éxito el desalojo, dijo que los agentes llegaron sin orden judicial y con la intención de destruir todo, a pesar de que las “casas” ahí construidas son de latas, plásticos y madera.
El representante de los tomatierra Alex Montenegro anunció ayer que no abandonarán el lugar porque esos lotes les pertenecen.
Según Montenegro, durante algunas semanas estuvieron investigando y se encontraron con que las tierras jamás habían sido adquiridas por las monjitas.
POLICÍA LAMENTA
Por su parte, el comisionado mayor Fernando Borge, jefe de Relaciones Públicas de la Policía, dijo que lamenta los hechos sucedidos donde al menos cuatro agentes resultaron heridos. Borge defendió el actuar de la Policía y adelantó que van a analizar, revisar y esperar orientaciones de la jefatura al respecto.
Agregó que la institución policial está en el deber de resguardar y brindar protección a las propiedades de los particulares.
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