Vladimir Vásquez
El negocio de la distribución energética en Nicaragua no parece ser muy atractivo para las diferentes empresas internacionales.
El presidente de Polaris Energy, Mario Arana, asegura que debido a las pérdidas de energía que registra la actual empresa de distribución eléctrica Disnorte-Dissur, no se puede asegurar que la comercialización de energía sea un negocio rentable.
Actualmente Gas Natural reporta pérdidas de unos cincuenta millones de dólares anuales por la sustracción ilegal de energía y las llamadas pérdidas técnicas que son comunes en cualquier país del mundo, según las cifras oficiales.
“Se deben plantear metas realistas que le den sostenibilidad de largo plazo al sector y tratar de solucionar el problema de las pérdidas”, explica Arana.
ESTABILIDAD PARA ATRAER LA INVERSIÓN
Darle estabilidad al sistema de distribución eléctrica es importante para seguir atrayendo inversión al país, pues esto le dará “seguridad a las generadoras, de que la empresa puede seguir cumpliendo sus compromisos”.
Hasta el momento las negociaciones entre Gas Natural y el Gobierno para lograr un mayor reconocimiento de las pérdidas avanza y recientemente el director del Instituto Nicaragüense de Energía, David Castillo, dijo que podrían concretarse estas negociaciones y que podría reconocer una parte de unos 15 millones de dólares.
REPORTAN MÁS PERDIDAS
El director del INE asegura que las pérdidas no han incrementado de forma porcentual, pero sí en valor ya que la energía es más cara. Ahora se reportan 10 o 12 millones de dólares más en pérdidas energéticas. La mayoría de estas relacionadas con la sustracción ilegal de energía eléctrica en barrios.
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