Pekín/EFE
Las autoridades chinas emitieron una alerta por la densa y dañina capa de contaminación que cubre a 17 provincias.
Pekín se ha convertido en el peor caso de polución en la historia de la capital, que fue calificada de “severamente dañina o peligrosa”.
Los ciudadanos de más de la mitad del país han sido llamados a no salir de sus casas para evitar los efectos de la polución.
La jefa de la Oficina del Clima y la Energía de Asia Oriental de Greenpeace, Zhou Rong, declaró que la calidad del aire de la capital es la peor registrada en su historia y la situación es parecida en otras tres ciudades de la provincia de Hebei (Norte) y en Tianjin (Este).
“Es tan terrible que es difícil respirar”, subrayó Zhou, la responsable de la ONG ecologista.
La fuerte contaminación, sin embargo, no impidió que las calles de la capital mantuvieran el tráfico normal y que algunos decidieran continuar con sus habituales ejercicios de tai chi, en horas de la mañana, o se animaran a patinar en las congeladas superficies de los lagos de algunos parques.
Según la agencia oficial Xinhua, la capa contaminante sobre Pekín se mantendrá tres días más.
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