Gloria Picón Duarte
Un análisis realizado por la Unión Demócrata Cristiana (UDC) indica que aun cuando los gastos en el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) crecen, aún hay solvencia financiera en el corto plazo por el aporte de las cotizaciones más los ingresos generados de las ganancias de sus inversiones. Sin embargo, en el mediano plazo la situación financiera del INSS podría ser “caótica” debido a que su déficit para cumplir con las pensiones está incrementando.
La UDC plantea que a medida que la población en Nicaragua envejece la proporción de ocupados jóvenes que cotizarán disminuirá respecto a la cantidad de personas mayores que requerirán una pensión.
Dicha conclusión la hacen con base en estadísticas del Instituto Nacional de Información de Desarrollo (Inide), que indican que en el 2010 existían cerca de diez personas en edad de trabajar por cada adulto mayor de 60 años, sin embargo se estima que esa relación se verá disminuida hasta en seis y tres en 2025 y 2050, respectivamente.
La UDC manifiesta que dichas estimaciones conducen a la necesidad de que en el mediano plazo se tenga que modificar el actual sistema de obtención de recursos para hacer posible la sostenibilidad económica del INSS, ya que el actual sistema se está acercando a su fase de agotamiento. Pero no se comparte la propuesta de reforma del Gobierno central, ya que consideran que en ella se está negando el derecho a las futuras generaciones de gozar de pensiones dignas al duplicar la semana de cotizaciones y extender a 65 años la edad para jubilarse.
La UDC propone que el cálculo del monto de la pensión de vejez en lugar de realizarse sobre el promedio salarial de la vida laboral del trabajador se haga con base en el promedio de los mejores salarios devengados.
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