Moisés Martínez
La Dirección General de Aduanas (DGA) realizó un trámite especial denominado “declaración de oficio” para rebajar el valor comercial real de los 14 vehículos introducidos por la esposa e hijos del magistrado electoral de facto, Roberto Rivas Reyes, en 2009, según se determina por la documentación en poder de este Diario.
La declaración de oficio son gestiones extraordinarias hechas por el mismo personal de Aduanas, el cual se encarga de hacer trámites referidos a valorar la mercancía y en base a eso cobrar los impuestos de importación, determinados por el precio de los bienes.
La DGA al valorar los 14 vehículos introducidos por la familia del magistrado electoral de facto por debajo de sus valores reales de mercado, permitió que el Estado dejara de percibir hasta 5.1 millones de córdobas en impuestos de importación que debían haber pagado los Rivas por la introducción de los automotores, explicaron fuentes vinculadas a Aduanas y según se corrobora en la documentación en poder del Diario.
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Las boletas de liquidación en poder de LA PRENSA establecen que la Aduana obvió el valor FOB (Free on Board, precio de la mercancía cuando está en el puerto de exportación) de los automotores registrados en las boletas de liquidación, el cual claramente no correspondía con el precio real de mercado de los vehículos.
“La declaración de oficio es cuando alguien trae una mercancía y no lo declara, sino que la Aduana, al no haber una declaración de parte del usuario o importador, se la hace de oficio. Son casos extraordinarios y especiales”, explicó René Vallecillo, experto en temas tributarios.
“Este tipo de gestiones se dan cuando son importaciones ocasionales, cuando un importador trae mercancía por primera vez y si sus montos son extraordinarios, por encima de los dos mil dólares”, agregó.
Vallecillo explicó que la decisión de aplicar las declaraciones de oficio para las importaciones de bienes es potestad exclusiva de las autoridades de la Aduana.
“Las declaraciones de oficio pueden cubrir mercancías mayores a los dos mil dólares, siempre y cuando sean mercancías para comercializar. En el caso de vehículos, si yo no soy importador tengo que buscar una agencia aduanera que llene los formularios respectivos de declaración aduanera y en base a eso la agencia aduanera hace la liquidación. Cuando no interviene la agencia aduanera, se hace la declaración de oficio. Pero esto es cuando son casos especiales y no son montos grandes. En todo caso, eso lo decide la Aduana”, añadió el especialista.
Las autoridades de la DGA aun no aclaran ni explican las razones de esta discrecionalidad y privilegios con que gestionaron la importación de estos vehículos para la familia del magistrado electoral.
Por su parte, Rivas Reyes tampoco ha explicado cómo sus ingresos como funcionario público y rector de Universidad Católica (12 mil dólares por ambos trabajos) le permitieron en 2009 importar ese año 418 mil dólares en vehículos, monto total de los 14 automotores sumando su precio de mercado vigente en 2009.
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