Lucía Vargas
En el taller de las hamacas del Café de las Sonrisas, en Granada, se elaboró una hamaca para el papa emérito Benedicto XVI y hace algunos días se concluyó la del papa Francisco.
Ambas serán obsequiadas a los pontífices, pero antes permanecerán en exhibición hasta el domingo 28 de abril, en el salón de ese edificio que se ubica de la iglesia La Merced, media cuadra al lago.
Este taller es parte del proyecto que dirige Antonio Prieto, conocido cariñosamente en la ciudad como Tío Antonio.
Jimmy, un joven no vidente de 33 años, elaboró paso a paso la obra de arte dedicada al papa Francisco. La hizo en tres días, mientras dos muchachos más le apoyaron en el tejido del macramé (nudos decorativos) de los bordes.
Este muchacho lleva tres años trabajando en el taller de las hamacas que impulsó Tío Antonio para apoyar y dar un lugar digno en el espacio laboral a las personas con problemas de visión y sordomudos.
Este taller está ubicado al lado del otro proyecto Café de las Sonrisas, atendido por personas con discapacidad auditiva y oral.
Prieto dijo que el proyecto ya fue presentado al obispo de la Diócesis de Granada, monseñor Jorge Solórzano, quien se mostró muy emocionado con la idea de enviar este mensaje de cariño al Vaticano de parte de la ciudad de Granada.
Explicó que están analizando ahora cómo la Iglesia va a recibir las hamacas para que a través de las autoridades competentes se haga llegar el obsequio en mayo.
Prieto explicó que las hamacas llevan una almohada cada una y estas tendrán el escudo de cada papa.
EXPOSICIÓN DE OBRAS
Dijo que ya se dieron a bordar los escudos y las almohadas se confeccionaron en lino egipcio. Ambas hamacas tienen un diseño único que no se volverá a repetir.
La exposición de las hamacas será acompañada de una colección de fotos que muestra el proceso de elaboración y dos libros para que la gente que llegue a ver la obra firme y escriba un mensaje a ambos papas, con el propósito de también enviarlos a Roma. La exposición estará abierta de 8:00 a.m. a 8:00 p.m.
Explicó que la iniciativa salió cuando el papa Benedicto renunció. “Se habló del tema, hablé con los muchachos y Jimmy, que es no vidente, dijo que deseaba hacerla”, citó Prieto.
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