WASHINGTON/AFP
El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, culpó al gobierno iraní por un mortal ataque a un campamento de opositores en Irak, y manifestó temores sobre otro posible atentado.
“Estoy muy preocupado por la posibilidad de otro ataque”, dijo Kerry ante el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, al ser consultado sobre un ataque que tuvo lugar en febrero en un campamento del grupo de disidentes iraníes exiliados del MEK.
Los Muyahidines del Pueblo Iraní (MEK) acusaron a Teherán de estar detrás del ataque con mortero al Campamento Libertad, una ex base militar estadounidense cerca de Bagdad que refugia a cerca de 3,000 miembros del grupo, en el que murieron siete personas.
Kerry dijo a los legisladores que había planteado la cuestión al primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki, durante una visita a Bagdad el mes pasado, y agregó que estaba “preocupado por la situación en materia de seguridad” en el campamento.
“Creo que es el gobierno iraní el que estuvo detrás de los ataques”, agregó.
El MEK fue fundado en la década de 1960 para oponerse al Sah de Irán, y luego de la revolución islámica de 1979 tomó las armas contra los gobernantes religiosos del país. La organización dice que ahora ha abandonado la lucha armada y que trabaja para derrotar al régimen islamista de Teherán a través de medios pacíficos.