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Rosendo Álvarez se fundió en un abrazo con el mexicano Ignacio “Nacho” Beristáin, el entrenador de un viejo rival como Ricardo “Finito” López. LA PRENSA/E. OPORTA

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El entrenador mexicano Ignacio “Nacho” Beristán siguió compartiendo sus conocimientos, historias y anécdotas con los nicaragüenses.

 

 

Pablo Fletes

El entrenador mexicano Ignacio “Nacho” Beristán siguió compartiendo sus conocimientos, historias y anécdotas con los nicaragüenses.

Aprovechando su presencia, la Alcaldía de Managua lo nombre “Huesped de Honor”, en un evento que fue organizado este viernes en la comuna capitalina.

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Daysi Torres, alcaldesa de Managua, y Enrique Armas, vicealcalde, fueron los encargados de nombrar “Huesped de Honor” al entrenador mexicano Ignacio “Nacho” Beristáin, ayer en la Alcaldía de Managua.

Beristáin agradeció el gesto de las autoridades de la comuna capitalina, y prometió abrir las puertas de su gimnasio “Romanza”, en Ciudad México, a los entrenadores de la Alcaldía de Managua.

Armas dijo que la Alcaldía seleccionaría a los entrenadores que periódicamente viajarían de dos a cuatro semanas a México para aumentar sus conocimientos en la “Romanza”, el gimnasio en el que entrena Juan Manuel Márquez.

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Pero lo mejor fue el tiempo que dedicó Beristáin a los entrenadores de boxeo que laboran en los tres gimnasios de la Alcaldía de Managua, a los peleadores profesionales, aficionados y una buena parte de público que abarrotó el Auditorio Miguel Larreynaga.

“Estoy contento con esta oportunidad que me están dando de compartir con los compañeros entrenadores”, dijo Beristáin. “Me gusta ver también a Rosendo Álvarez, ya retirado, porque como boxeador me dio muchos dolores de cabeza en sus peleas con Ricardo López”, comentó Beristáin.

Este reencuentro de Beristáin con Álvarez fue uno de los momentos más interesantes de la jornada de ayer con Beristáin, porque el peleador nicaragüense fue un digno rival del “Finito” López, al empatar una pelea y perder en la revancha en una cerrado fallo, en uno de los duelos más memorables en la división mínima.

“Yo nunca quise que Ricardo peleara con Rosendo, porque este muchacho era un peleador muy fuerte, con brazos cortos, manos fuertes. Era un peleador contundente, y Ricardo exigió la segunda pelea a Don King, algo con lo que nunca estuve de acuerdo”.

“En esas dos peleas Ricardo perdió muchas facultades, no fue el mismo, porque Rosendo lo exigió al máximo”, reiteró Beristáin.

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Beristáin aclaró de entrada que no venía con intenciones de brindar seminarios o decirles cómo hacer el trabajo a los entrenadores nicas.

Más bien, reconoció el respeto del boxeo pinolero a nivel internacional, con grandes representantes a lo largo de la historia como Alexis Argüello, Rosendo, Ricardo Mayorga, y actualmente Román “Chocolatito” González, quien para Beristáin es el segundo mejor nicaragüenses que sus ojos han visto.

Beristáin entrena desde muy joven a Juan Manuel Márquez, quien a finales del año pasado le propinó un estrepitoso nocaut al filipino Manny Pacquiao.

Recordó todo lo sucedido en la pelea, el nocaut y el llamado de atención que le hizo a su equipo de trabajo, que saltaban de alegría por nocaut sufrido por el filipino.

Deportes Beristáin Rosendo archivo

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