Guatemala/ACAN-EFE
El plazo de diez días hábiles para que la defensa del exdictador guatemalteco José Efraín Ríos Montt apele la condena de 80 años de prisión por genocidio y crímenes de guerra dictada el pasado 10 de mayo por un tribunal penal de esta ciudad, inició a partir de hoy con la notificación de la sentencia.
El Tribunal Primero A de Mayor Riesgo notificó esta viernes oficialmente su sentencia a las partes procesales, con lo que se inicia el plazo de diez días hábiles establecido en la legislación guatemalteca para que se presenten las impugnaciones que se consideren.
Ello significa que los defensores tienen hasta el 31 de mayo, descontando fines de semana.
El abogado Francisco García Gudiel, defensor de Ríos Montt, dijo a los periodistas que antes de apelar el fallo, el cual considera “ilegal”, esperará a que la Corte de Constitucionalidad (CC) resuelve los recursos que fueron presentados a lo largo del juicio, los cuales tenían como objetivo suspender y anular el proceso.
“Vamos a hacer una ampliación de los ocursos que ya están (en la Corte) para detallar de manera específica y argumentar todas las violaciones que el tribunal cometió para que la Corte tenga más insumos a la hora de resolver”, dijo el letrado.
Se prevé que los magistrados de la CC resuelvan los cuatro recursos pendientes el próximo lunes, y si los mismos no favorecen a Ríos Montt, sus abogados procederían en las horas siguientes a presentar la apelación de la sentencia.
García Gudiel advirtió que si las resoluciones de la CC no favorecen a su defendido, unas 45,000 personas saldrán a las calles para manifestarse “en contra de esa injusticia”.
Ríos Montt, de 86 años, quien gobernó de facto Guatemala entre marzo de 1982 y agosto de 1983, se convirtió el pasado 10 de mayo en el primer exjefe de Estado latinoamericano en ser condenado por genocidio y crímenes de guerra, por la violenta represión sufrida por los indígenas durante la guerra de 36 años (1960-1996) que desangró a este país.
El anciano general permanece hospitalizado desde el lunes pasado en un sanatorio militar, tras presentar problemas de próstata y presión arterial.