Judith Flores
Corresponsal / Miami
“El orteguismo no está fuerte, tiene muchas contradicciones y descontentos internos, se está quedando sin el apoyo venezolano y los malestares en el país van a ir creciendo, hay que emplear esas variables para acorralarlo” es la tesis expuesta por la presidenta del Movimiento Renovador Sandinista (MRS), Ana Margarita Vijil, durante encuentros con grupos de nicaragüenses en Miami.
Vijil realiza una visita de varios días a Miami, el propósito: escuchar inquietudes, puntos de vistas y propuestas de nicaragüenses para enfrentar al orteguismo. Al final de la tarde de hoy, se reunirá con el congresista Joe García, como parte de una estrategia que promueve el MRS, informar sobre la situación de ilegalidad y violaciones a la Constitución de parte del actual gobierno.
La estrategia incluye la unidad de distintos sectores de nicaragüenses en el interior y exterior del país con el único fin, sacar del poder al presidente inconstitucional Daniel Ortega, y recobrar la institucionalidad en el país.
Para Vijil los próximos 18 meses son vitales para sentar las bases de organización. Asegura que las condiciones -de pobreza, desempleo, corrupción, pérdida de los espacios democráticos, y el voraz enriquecimiento de la familia Ortega-Murillo- están dadas para luchar en pro de la apertura de espacios democráticos, “el primer paso es lograr el cambio del árbitro –Consejo Supremo Electoral-, si vamos con el mismo árbitro a las próximas elecciones, nada se estaría haciendo”.
Describió al orteguismo como una fuerza parafamiliar que trabaja en beneficio personal, una situación que asegura está provocando descontento a lo interno del partido orteguista.
“No es una fuerza monolítica a la que tengamos que tener miedo, es un grupo de contradicciones y esto es una ventana de oportunidades, no es cierto que la gente está feliz, y la cooperación venezolana va en detrimento”.
La cooperación venezolana solo ha beneficiado al 12 por ciento de la población, el 6 por ciento de ese grupo, ha recibido como único beneficio las campañas de vacunación.
“Significa que el plan techo del que hace gran publicidad, los programas hambre cero, usura cero, solo han llegado al 6 por ciento de la población”, dijo Vijil.
FALTA DE CONFIANZA
La representante del MRS enfrentó señalamientos sobre la participación de algunos fundadores de esa agrupación en actos de crímenes, represión y robos durante el gobierno sandinista en la década de los 80, y luego en la piñata sandinista en 1990, una situación que a juicio de algunos participantes del encuentro no genera confianza en ese movimiento.
“Cuándo pedirán perdón al pueblo de Nicaragua, cuándo devolverán lo robado?”, fue parte de los cuestionamientos.
Vijil dijo que el nuevo liderazgo de ese partido no tiene responsabilidad en esos hechos “una vez que se recupere la institucionalidad del país, las personas que quieran promover acusaciones podrán hacerlo”.
Pero esa posibilidad es remota, el gobierno sandinista de la época se aprobó una amnistía a la medida.
OPOSICIÓN DE VERDAD
“Hay una dictadura en el país, los que estamos viviendo las vacas flacas, presión, represión, que estamos sin trabajo, que nos reprimen porque pensamos distinto, los que no nos venden en Enabas, somos los opositores verdaderos, que más garantías que esas, – en Nicaragua- todos nos conocemos y estamos claros quiénes les están haciendo el juego al orteguismo”, apuntó la líder política.
Vijil dijo que el MRS realiza una oposición probada, coherente y de principios desde el 2006.
