Luis Eduardo Martínez M.
Custodiado y esposado, Alexander Pérez Cruz parecía posar para las cámaras de los medios de comunicación e ingresó sonriente al Complejo Judicial de Matagalpa, donde la tarde de este domingo admitió haber asesinado a machetazos a Bernardo José Tiffer, un profesor de primaria que gozaba del aprecio de la comunidad donde impartía clases.
Tiffer, de 50 años, recibió 34 machetazos en distintas partes del cuerpo, mayoritariamente en la cabeza la mañana del 10 de junio.
Tras las investigaciones policiales, el Ministerio Público acusó a Pérez Cruz, de 19 años y a Leomar Antonio López Díaz, de 42, como presuntos coautores del asesinato en perjuicio del docente, imputándoles además el delito de crimen organizado.
López Díaz, con domicilio en la comunidad Ocote Sur, todavía está prófugo, aunque Pérez Cruz aseguró este domingo que él actuó solitario en el crimen.
“Yo solo lo maté, no participó nadie más”, dijo Pérez Cruz a LA PRENSA, previo a la audiencia preliminar del proceso en el que la fiscal auxiliar Norma Estrada sostuvo la acusación contra él y López Díaz.
Según la acusación, Tiffer iba a la escuela de Los Mangos, pero al pasar por la quebrada conocida como El Piche, fue interceptado por Pérez y López, quienes por presuntos “problemas anteriores”, lo atacaron a machetazos y luego huyeron del sitio.
En el lugar del crimen, la Policía encontró unas gafas negras con puntos rojos que días antes, un testigo había vendido a Pérez Cruz, quien fue detenido el viernes recién pasado y ese mismo día, en presencia de una abogada, admitió su responsabilidad ante la Policía y la Fiscalía.
Pérez llevó el mismo viernes a los investigadores hasta un área boscosa donde había semienterrado el machete con el que atacó a Tiffer, refiere la acusación.
Antes de la audiencia, ayer, Pérez relató que el día del crimen “iba a buscar leña, no llevaba intención de nada, pero él (Tiffer) me llamó y me comenzó a tratar (…). Cuando le digo: “Eso es mentira, él hace a darme con una piedra, (y a) agredirme pues y no me quedó de otra que darle (con el machete)”.
Pérez dijo que conocía al maestro, pero había discutido con él algunas veces: “Primero por un camino y después él me vulgareó delante de un gentío”. La última vez habría sido el 10 de junio, cuando según sostuvo, el profesor presuntamente le reclamó por decirle “niño”.
La fiscal auxiliar Norma Estrada dijo que en el caso concurrieron al menos dos circunstancias agravantes y pidió una condena que oscile entre 25 y treinta años de prisión contra Pérez.
26 de junio. Esa es la fecha en que el juez Wilford Bustamante Rocha, suplente del Juzgado Único de Distrito Penal de Audiencia de Matagalpa, notificará la sentencia en contra de Alexánder Pérez.
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