Alina Lorío L.
“Sabemos que mucho depende de una excelente preparación de tierra antes de sembrar, pero estamos a tiempo de controlar la plaga”, insistió Erick Ramírez, inspector fitosanitario de Sanidad Vegetal del Magfor en Nueva Segovia.
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La plaga conocida como el cogollero apenas alcanza, hasta el 21 de junio, el 0.45 por ciento de las plantaciones en la siembra de primera del maíz en el departamento de Nueva Segovia, según inspección técnica realizada por el Ministerio Agropecuario y Forestal (Magfor). Sin embargo, en los municipios de la denominada zona seca las afectaciones son considerables.
Erick Ramírez, inspector fitosanitario de Sanidad Vegetal del Magfor en Nueva Segovia, reveló que en el departamento fueron sembradas en mayo unas 25 mil manzanas con maíz, de las cuales Jalapa, El Jícaro, Quilalí y Wiwilí tienen la mayor parte.
Del total del área sembrada, solo 108 manzanas estaban afectadas por el gusano cogollero, que ataca las hojas tiernas de la planta.
Ocotal, municipio cabecera departamental que se caracteriza por concentrar su población solo en el casco urbano, llegó en el ciclo de primera del maíz a sembrar 85 manzanas, de las cuales 15 manzanas ya fueron destruidas por el cogollero.
“Convocaremos a los productores, que por su inexperiencia desconoce sobre el manejo de algunas plagas, para detener con ellos el avance de la plaga”, recalcó Erick Ramírez.
El funcionario dijo que por efectos de la plaga la producción de maíz en el departamento no corre riesgo, pero aclaró que en las zonas afectadas —la conocida zona seca— el control químico es la última opción y tiene que ver con el monitoreo constante, con las prácticas mecánicas, físicas y biológicas que sirven de controladores naturales.
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