Lucha por un cambio
En estos días, Nicaragua entera vuelve a caer presa del populismo, de las frases rebuscadas y repetidas con mayor fuerza, para conmemorar un año más en que nuestro país cayó en las garras de un socialismo-comunismo.
Este sistema, desde que irrumpió en Nicaragua, no ha traído más que desorden institucional, debacle económica, pérdida de valores y otras cosas que nuestro pueblo conoce.
2013. El FSLN mantiene el poder basado en un asqueroso fraude electoral que ha sido cubierto por las pseudo-repúblicas de Latinoamérica, con la complicidad del organismo que debería de velar por el cumplimiento de las constituciones políticas de nuestros países, pero se hace de la vista gorda, como es la OEA.
Los ciudadanos que queremos a Nicaragua, debemos de tomar ejemplo de los jóvenes que han apoyado a los adultos mayores, quienes sin mayor interés político provocaron una reacción en las redes sociales en Nicaragua y en varios países, sin precedentes y por ello fueron vapuleados, asaltados por jóvenes que han sido manipulados con migajas por la mente retorcida del socialismo nicaragüense, engañados con licor, con libertinaje. Esta acción cobarde sin embargo, nos ha enseñado que el gobierno no es omnisciente ni todo poderoso, dado que tuvo que obligar a muchos empleados públicos, a salir de sus oficinas (en detrimento de la institucionalidad del país) para apoyar una marcha oficialista dizque en apoyo de las demandas de los adultos mayores. Esto no ha sido una demostración de poder, ha sido una demostración de debilidad de esta dictadura.
Hagamos nuestro mayor esfuerzo como nicaragüenses para demostrarles a la dictadura comunista que sí queremos a nuestro país, que no tenemos miedo, que podemos sacar adelante a nuestro país de la pobreza con reglas claras, sin prebendas, con respeto y con sentido de ciudadanía.
Esto es un trabajo que tenemos que llevar a cabo día a día y no dejar apagar esta llama que encendieron los #OcupaINSS, y luchar con ansías para tener un cambio en Nicaragua.
Oliver Reyes Villalta
Ferias turísticas
Me parece buena la iniciativa de las “ferias turísticas” que el Gobierno central promueve en algunos municipios, a través del Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur) en coordinación con autoridades locales. Sin embargo, quiero señalar que observo que la mayoría de los visitantes son funcionarios de las comunas donde estas se realizan, asimismo familiares de estos.
Lo que pretendo marcar es una crítica constructiva: 1) Solamente convocan a comerciantes de la línea política del Gobierno, cuando se sabe que el desarrollo económico de un territorio no depende exclusivamente de gente con pensamiento político de “izquierda”. 2). Se observa que la mayoría de visitantes visten camisas alusivas al aniversario de la revolución, obviamente, quienes no simpatizan con el actual Gobierno brillan por su ausencia. 3) Los precios de los productos que ofertan no compiten con el mercado local. 4) Hacen una mezcolanza de consultas médicas con la dinámica de mercadeo de la feria. Haciéndose algo así como “arroz con mango”. 5) Se nota cierre de las calles centrales lo que ocasiona congestionamiento peatonal y vehicular, por lo que estas se pueden realizar en un espacio abierto como por ejemplo: estadios, terminales de buses, cuadros de futbol, entre otros. 6) Hacen falta vendedores de servicios, tales como: bufetes de abogados, propietarios de talleres de soldadura, mecánica y electricidad automotora. Y por último, no siendo menos importante, se puede convocar a medianos y grandes empresarios (presentes en la circunscripción), con el propósito de buscar acercamiento entre consumidores y proveedores, asimismo retroalimentar las experiencias.
Hago un llamado a los organizadores de las ferias a que las promuevan con quienes día a día se encuentran en armonía con la economía territorial, y de esta manera lograr el tan anhelado equilibrio entre la oferta y la demanda, sin distingos de colores políticos.
Salomón Samuel Mendoza Suárez, municipalista
Tribunal de la Familia cobra carga fiscal
Los Juzgados de Managua están cobrando la carga fiscal de diez córdobas en las fotocopias de los poderes judiciales cuando se interpone una demanda. Esto también lo está aplicando el Tribunal de la Familia, que en los casos de apelación exigen que a todos los folios se les agregue un timbre de diez córdobas. De manera que en un caso de cien folios, una madre que anda buscando alimentos para su hijo debe gastar mil córdobas en timbres, porque exigen a cada copia un timbre de diez córdobas. Sin embargo, en los juicios de alimentación la Ley establece que se tramitará en papel común, en todo caso no se debe cobrar la carga fiscal por la apelación que se dé por alguna de las partes.
El comunicado 02-2013 emitido por la Dirección General de Ingresos (DGI) el 2 de enero del presente año, dio a conocer las nuevas tarifas para timbres fiscales y papel sellado establece en el numeral 6 “Expedientes de juicios civiles de mayor cuantía, mercantiles y de tramitación administrativa o tributaria”, cada hoja a 10 córdobas.
El concepto en sí es confuso, no explica si en una apelación todas las fotocopias deben de ir con la carga fiscal. Lo mismo pasa con las fotocopias de los poderes, si el original ya cumple con la carga fiscal ¿Por qué se le debe agregar otra carga a la fotocopia cuando se interpone una demanda? Al poder general judicial se le adjunta la carga fiscal de cincuenta córdobas y a la fotocopia que es autenticada por el oficial receptor de Ordice, diez córdobas, entonces esa fotocopia deja de ser igual al original.
La Corte Suprema de Justicia o la DGI debería pronunciarse al respecto, si es a como lo están aplicando los jueces o dejar claro que solo en los casos de mayor cuantía.
Por el momento en el Tribunal de la Familia están cobrando la carga fiscal en juicios de menor cuantía, además que no se debe de cobrar.
Alejandro Calero Dávila, Abogado
Bono a adultos mayores
Sobre el bono a los adultos mayores anunciado recientemente por el Gobierno a través de la jefa de comunicación Rosario Murillo, tengo una inquietud: ¿A quiénes realmente se les entregará el bono? ¿A los adultos mayores que tienen los 70 años cumplidos y no completaron su cuota, o a todos los que reciben pensión más los del adulto mayor?
Si fuese así, ¿cómo se sabe por departamento quiénes están en esas listas y quiénes recibirán el bono?
Hago esta pregunta porque soy de León y en esta ciudad nadie da esa información. Los funcionarios del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) dicen que en eso no se meten ellos. Hay abuelos que tienen 680 cuotas, han ido al Banpro y no hay ningún bono. Me gustaría alguna aclaración sobre eso.
Julio Quintana C.
Aclaración en nombre
En el artículo publicado el 18 de julio corriente en la sección de Activos, titulado Piden alivio en energía, se citó por error a Rosendo Mayorga, como presidente de la Cámara de Industria de Nicaragua (Cadin), cuando lo correcto es Rodrigo Caldera.
Por este inconveniente pido disculpas al señor Caldera y a los lectores.
Wendy Álvarez
Ver en la versión impresa las páginas: 11 A
