Gloria PIcón Duarte
Para Montenegro la comisión que discuta la propuesta de reforma deber tomar en cuenta criterio de sicólogos, sociólogos y penalistas.
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Después de que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) envió la iniciativa de reforma al artículo 46 de la Ley Integral contra la Violencia hacia las Mujeres (Ley 779), que permitirá la mediación en delitos con penas menores a cinco años, los diputados se debaten entre si votar de acuerdo a su posición personal o la de bancada.
El diputado Carlos Emilio López miembro del Frente Sandinista señala que restituir la mediación en la Ley 779, sería “cosificar” a las mujeres. “La posición de este servidor es que no se incluya la mediación y que se mantenga la ley tal y como fue elaborada y aprobada por esta Asamblea Nacional, porque si nosotros incluimos la mediación pondríamos a la mujer en una guillotina, si se restituye la figura de la mediación es mandar a la crucifixión a miles de mujeres, estaríamos colocando la vida de las mujeres como si fuera una cosa”, dijo López.
A criterio del parlamentario la mediación se lleva a cabo en disputas y litigios que tienen que ver con bienes materiales en Derecho Mercantil, Derecho Laboral, Derecho Comercial, Derecho Civil. “Pero aquí hablamos de la vida, la humanidad, la dignidad y la libertad de las mujeres, mediar en este tipo de delitos sería cosificar la vida de las mujeres”, sostuvo López.
La diputada Martha Marina González, presidenta de la Comisión de la Mujer en la Asamblea Nacional, también es del criterio de que la mediación no debe ser aceptada, sin embargo señala que acatará lo que su bancada decida. “Mi posición personal es que no debe haber mediación, pero si la bancada toma una posición yo soy militante de un partido, me debo a un partido y me debo a la bancada”, afirmó.
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