Martha Vásquez y Elida Rodríguez
Al estilo del sicariato, dos sujetos aún sin identificar a bordo de una motocicleta irrumpieron en el bar El rincón de Camilo, ubicado en Reparto San Juan, donde William Mariano Calderón, de 52 años, tomaba licor en compañía de Jaqueline Soto Vado, de 27 años, el sábado y le propinaron varios disparos causándole la muerte.
Los desconocidos huyeron inmediatamente del lugar, dejando heridas a tres personas más que trataron de evitar el asesinato, según el informe de la Policía Nacional.
William Calderón fue investigado en el 2006 por el asesinato, extorsión y robo contra el empresario de clubes nocturnos, Jerónimo Polanco, asesinado el 28 de marzo de ese mismo año.
Según se desprendió de esa investigación, Calderón fue informante de la Policía cuando el comisionado mayor —ahora en retiro— Carlos Bendaña era jefe de la Dirección de Investigaciones Económicas (DIE) y cuando fue jefe de Managua.
Además, Calderón no solo se hacía pasar como comisionado de la Policía, según confirman las entrevistas realizadas por funcionarios de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), sino que en una hoja de registro migratorio de salida hacia Honduras estableció como su profesión u oficio la de policía.
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De acuerdo con Mery Esperanza Hernández, esposa del hoy occiso, cuando llegó a la escena del crimen, la ambulancia ya había salido con el cuerpo de Calderón hacia el hospital Manolo Morales e inmediatamente se trasladó al centro hospitalario donde le informaron que su esposo ya había fallecido.
“Tiene cuatro impactos de bala, dos en el brazo derecho, uno en la axila derecha y otro que penetró el abdomen”, dijo Hernández, mientras esperaba el cuerpo de su marido en la funeraria La Católica, donde fue velado ayer.
Según información policial, Calderón no tuvo tiempo de defenderse porque le dispararon de sorpresa. Al momento del crimen, tres clientes del local intentaron controlar la situación, pero también resultaron heridos. Los nombres se omiten por cuestiones de seguridad, dijo la Policía.
Los sujetos aprovecharon la tormenta y el escándalo de los clientes del lugar para huir bajo el aguacero que azotó Managua esa noche.
HAY VARIOS TESTIGOS
El subcomisionado Orlando Arévalo, jefe de información y análisis del Distrito Uno de la Policía Nacional, aseguró que la mujer que acompañaba al ahora occiso fue interrogada y proporcionó detalles físicos de los atacantes.
“Ella es la pieza clave para dar con los autores del crimen”, explicó Arévalo.
La esposa de Calderón también ha sido interrogada dos veces por agentes policiales.
Arévalo explicó que aún no pueden asegurar que se trata de una pasada de cuentas o que la víctima tenía algún tipo de relación con el narcotráfico.
“Estamos investigando y no podemos asegurar nada hasta el momento. Hay testigos del hecho y estamos recolectando pruebas en la escena del crimen”, señaló el jefe policial.
El local permanece cerrado y con cintas amarillas en la entrada, debido a que las autoridades policiales continúan el proceso de investigación.
Según guardas de seguridad que permanecían la noche del sábado cerca del establecimiento, en el enfrentamiento resultaron tres personas heridas y una fallecida, pero se negaron a dar detalles de los sucesos, ya que se encuentran sorprendidos por la forma en que se dio el hecho.
Hernández, esposa de Calderón, dijo que su esposo trabajaba vendiendo llantas en Cotarsa y desconoce si tenía algún otro tipo de trabajo. También aseguró que su marido nunca le confió estar en problemas o tener alguna enemistad.
FUE INVESTIGADO POR ROBO DE ARMAS DE POLICÍA
Calderón es padre de Lenín Alberto Calderón, quien junto a Byron Leonel Centeno, chofer particular del comisionado mayor en retiro Bendaña, fue condenado a 18 años de cárcel por el asesinato de Jerónimo Polanco.
Según familiares, Calderón era quien más visitaba al joven en la cárcel. En marzo pasado también fue investigado por la Policía por el robo de armas propiedad de esa institución que estaban en reparación en el taller Maynard, ubicado en el barrio Santa Rosa de Managua.
“Lo quisieron involucrar, pero él (William) estaba limpio”, dijo Hernández.
El entierro está programado para hoy a las 10:00 de la mañana en el cementerio Milagro de Dios. “Mientras tanto, las investigaciones siguen avanzando”, sostiene la Policía del Distrito Uno de Policía.
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