En la década de los años setenta, los relojeros suizos casi tienen que salir de la industria cuando subvaluaron la relevancia del reloj pulsera de cuarzo. Pese a la recuperación de la industria y de que incluso prospera, hoy se enfrenta al nuevo reto tecnológico que presentan los relojes pulsera inteligentes como el Galaxy Gear de Samsung Electronics Co., que se vende a 299 dólares.
“¿Te gustaría si tu novio te trajera un reloj pulsera inteligente en vez de un reloj pulsera con diamantes?”, dijo Johann Riupert, accionista multimillonario controlante de Cie Finaciere Richemont SA, que comercializa 13 marcas de relojes, entre las que se cuentan Cartier y Vacheron Constantin. “No estoy seguro de que vaya a tener un impacto inmenso en los relojes pulsera clásicos”.
La industria tiene que mentalizarse respecto a que llegarán los relojes pulsera inteligentes, dijo Andreas Hofer, socio de Boston Consulting Group, en Zúrich.
Researcher Strategy Analytics anticipa ventas globales de un millón de relojes pulsera inteligentes para este año y de siete millones para 2014.
Sanford C. Bernstein pronostica que Apple Inc. podría ver la facturación del iWatch creciendo de 2,300 millones a 5,700 millones de dólares durante el primer año de ventas del dispositivo. Los relojeros suizos “no deberían decir con ligereza que se trata de una tendencia que no los afectará”, dijo el consultor Hofer, mientras miraba que su iPhone estuviera en hora. “Tiene que haber cierta humildad”.
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