Antes que la preocupación se volviera tangible, David Ortiz se encargó de arreglar las cosas la noche del jueves en el Fenway Park. Mandó la pelota sobre el “Monstruo Verde” y recuperó la ventaja para los Medias Rojas 2-1 en el sexto episodio contra el hasta ese momento intocable Michael Wacha, el sensacional novato de San Luis.
- 6:07 p.m.
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Los Cardenales tienen récord de 7-0 en esta postemporada, en partidos en los que ellos anotan primero que su rival. Cuando no es así, tienen 1-5.
Jake Peavy tuvo 12-5 y 4.17 en la campaña. Tiene 0-3 y 10.31 en postemporada. Joe Kelly tuvo 10-5 y 2.69 en la liga y 0-1 y 3.75 en playoffs.
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Pero San Luis no se rindió. Fue paciente en el home, agresivo en las bases y oportuno cuando el relevo y la defensa de Boston vacilaron en el séptimo inning, para recuperar las riendas del partido y volver a ponerlas en las manos de unos chavalos de brazos prodigiosos que, aunque parecen juveniles, lanzan como hombres.
Al final, la Serie Mundial está empatada 1-1, pero los Cardenales salieron de Boston con una satisfacción como si estuvieran en ventaja. Y quizá lo estén. Triunfaron en el estadio del oponente, regresan a jugar ante su público y los lanzadores que los Medias Rojas tienen para los siguientes dos juegos, levantan interrogantes.
Esta tarde, a las 6:07, Cardenales y Medias Rojas vuelven a verse las caras en el tercer juego de la Serie Mundial, ahora en el Busch Stadium de San Luis, con Joe Kelly, un derecho de 25 años, haciéndole frente al veterano, Jake Peavy, lanzador capaz de una gran presentación o de una salida discreta, casi en la misma proporción.
Peavy (12-5 y 4.17) y Kelly (10-5 y 2.69) tienen en común que nunca han ganado en postemporada, aunque el chavalo de los Cardenales ha lanzado mejor. Peavy, quien viene de ser castigado por Detroit (3in, 5h, 7cl) tiene 0-3 y 10.31 en cuatro aperturas en playoffs. Kelly, quien cayó ante los Dodgers, tiene 0-1 y 3.75 en 24 entradas.
¿QUÉ ESPERAR?
Haber salido de Boston con una victoria es llamativo para los Cardenales y nos da la impresión que eso les da una ventaja psicológica. Pero los Medias Rojas salieron así hacia Detroit y lograron prevalecer. Es decir, es difícil prever lo que va a ocurrir, y menos lo que se puede esperar de Peavy, y hasta del mismo Kelly.
Boston perderá a un bateador de calibre, al tener que situar en primera a David Ortiz, porque no hay designado. Mike Napoli podría ir al banco y eso será un respiro para el picheo de los Cardenales. San Luis debe sentar a Allen Craig, quien no parece estar totalmente recuperado de sus lesiones.
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