Erasmo Ramírez realizó otra apertura de impacto con los Cardenales de Lara en Venezuela y después de dos salidas sin decisión, por fin se anotó su primera victoria, al superar ayer 6-1 a los Bravos de Margarita.
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El big leaguer nicaragüense caminó cinco entradas de tres hits y una carrera limpia, con una base por bolas, un golpe y dos ponches, en un partido de siete innings debido a una doble programación. Los relevistas Nestor Molina y Carlos Misell aportaron un cero cada uno para completar el triunfo.
“Hice los ajustes a tiempo con el apoyo del coach de picheo. El cambio de velocidad y la recta fueron vitales, y mis otros lanzamientos se hicieron más fuertes”, declaró Erasmo a la prensa oficial de los Cardenales, después del juego.
El rivense se refirió en específico al primer inning, en el cual le anotaron la única carrera que permitió, por medio de un sencillo de Breyvic Valera y doblete remolcador de Wilmer Flores sin out.
Así que tuvo que emplearse a fondo para evitar más daño, al dominar en fila al núcleo ofensivo de los Bravos, compuesto por Carlos Rivero, Adam Duvall, a quien ponchó, y Kensuke Tanaka.
Lara no reaccionó hasta en el cuarto episodio, dándole vuelta al marcador con un racimo de cuatro anotaciones, una de ellas por jonrón de Luis Jiménez.
Los Cardenales anotaron dos más en el inicio del sexto y en el cierre ya no apareció el rivense que, con 14 innings recorridos en tres salidas, está a la mitad de su plan de 30 episodios en Venezuela.
Erasmo no había permitido carrera en sus dos primeras apariciones, así que su efectividad pasó de 0.00 a 0.64, pero logró su primera victoria y aún no pierde. Su dominio es asombroso, al admitir un hit cada dos innings (7 en 14), mientras regala cinco bases y abanica a 11. Su próxima salida es el lunes contra los Leones del Caracas.
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