Bloomberg News
El precio del trigo extendió una declinación respecto del nivel más alto en cuatro meses y el maíz se disponía a interrumpir siete semanas de aumento, luego de que informes de exportación de Estados Unidos indicaran un debilitamiento de la demanda y cediera el temor a una suspensión de los embarques del Mar Negro.
El trigo tuvo un mercado alcista en semanas pasadas, debido a las expectativas de que crezca la demanda de producción estadounidense y al temor de que los cargamentos de la región del Mar Negro puedan verse afectados como consecuencia de la crisis en Ucrania. El grano este año ha subido 11 por ciento.
Pero “los últimos datos de ventas sugieren que la demanda se ha visto afectada”, dijo en un informe Luke Mathews, un estratega de Commonwealth Bank of Australia. “Ahora son más los operadores y analistas que se preguntan si el aumento actual se ha recalentado”.
Exportadores de Estados Unidos dieron a conocer ventas de cosechas anteriores de 476,918 toneladas en la semana hasta el 6 de marzo, un 14 por ciento menos que la semana anterior y 46 por ciento en relación con igual periodo del año pasado, indicaron ayer datos del Departamento de Agricultura estadounidense (USDA, por sus siglas en inglés). Las ventas de maíz cayeron a 683,416 toneladas en el período, en comparación con 1.52 millones de la semana anterior.
CRISIS NO IMPACTARÁ
Toda interrupción de los envíos desde puertos de Crimea tendrá escaso impacto en el total de exportaciones de Ucrania, dijo el jueves pasado en un correo electrónico Dmitry Rylko, director del Instituto de Estudios del Mercado Agrícola, que tiene sede en Moscú. La región ucraniana votó este 16 de marzo en un referéndum para incorporarse a Rusia.
La soya para entrega en mayo declinó uno por ciento, y se ubicó en 13,827 dólares por bushel en Chicago. El precio es un 5.1 por ciento, más bajo que el de la semana pasada, y se encamina a la mayor caída desde el periodo hasta el 7 de junio.
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