Los 52 extrabajadores de Enacal, que fueron despedidos un 13 de mayo del 2007 por la entonces presidenta de esa cartera, Ruth Selma Herrera, siguen esperando que el Gobierno cumpla con la sentencia que emitió el Tribunal de Apelaciones de Granada y la resolución de la Asamblea Nacional, que mandó a pagarles sus prestaciones o a reintegrarlos.
Gustavo Adolfo Rodríguez es uno de los que sigue esperando. Dijo que trabajó en el área de electromecánica en Enacal Granada por muchas décadas y asegura que los despedidos mantuvieron por varias semanas una huelga por demanda de mejores salarios y otras prestaciones sociales.
Recordó que el lunes 14 de mayo del 2007 que llegaron a la empresa a laborar, tras el mandato del Ministerio del Trabajo que declaró ilegal la huelga, encontraron los portones cerrados y les entregaron la carta de despido con fecha de domingo 13 de mayo.
Los despidos se basaron en el artículo 45 del Código del Trabajo. “Nos adeudan lo de la cláusula 17 del convenio que estaba vigente en ese momento y eso significa más de 500 mil córdobas a cada trabajador”, dijo.
En espera
Lucrecia Castillo, explicó que su esposo Carlos Hernández Morales laboró más de 30 años en Enacal y al momento de recibir la carta de despido se desempeñaba como operador de grúa. Luego de siete años ha caído en depresión que lo mantiene imposibilitado.
Castillo dijo que el 11 de mayo del 2007 que era viernes, el Ministerio del Trabajo les notificó a los trabajadores que la huelga era ilegal y los mandó a reintegrarse a sus labores, por lo que el lunes 14 de mayo cumplieron, pero ya las cartas de despido estaban listas.