Roberto Mora
Consultada sobre los problemas de mala infraestructura y luminarias, la delegada del Mined, Socorro Olivas, informó que mejorar el centro es uno de los proyectos pendientes a ejecutar.
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Los estudiantes del turno nocturno del Instituto Guillermo Cano, conocido popularmente como la Anexa de la ciudad de Estelí, se quejaron de las malas condiciones de las aulas de clases, muchas de ellas sin iluminación adecuada. Por la noche hay unos 120 alumnos.
También son afectados más de 500 alumnos del turno sabatino que hacían reforzamiento escolar por la noche.
En algunas aulas solo una de seis lámparas funciona. Como si fuera poco, están malas las sillas y el cielo raso está cayéndose.
Ingrid Mairena Cárdenas, de quinto año, manifestó que no hay puertas, los pupitres están dañados y las paredes están deterioradas.
El problema de la iluminación ha sido crónico, pero en las últimas semanas ha empeorado. Mayerling Landes Centeno, de cuarto año, dijo que expusieron el problema ante el Mined, pero aún no tienen respuesta; mientras el profesor Ramón Rivera dijo que tienen pésimas condiciones para impartir las clases.
Martha González, de tercer año, explicó que estudia en la noche porque trabaja en el día, sin embargo las malas condiciones del lugar les está dificultando el aprendizaje.
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