Con resultados esperanzadores ya se está aplicando una nueva técnica para cargar las baterías de implantes corporales de forma inalámbrica desde fuera del cuerpo, que sirven para atender enfermedades de distinta índole como problemas del corazón, dolor crónico y enfermedades neurológicas, entre otras.
De esta forma, pronto podría haber una nueva generación de dispositivos tan pequeños que pueden ir más profundo en el interior del cuerpo, mantener sus cargas e incluso funcionar sin una batería.
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