Bruselas/EFE
La Unión Europea (UE) puso hoy en marcha la campaña “No mires para otro lado” que busca combatir la violencia sexual contra los menores en Brasil durante la celebración de la Copa del Mundo de fútbol y que también llama a locales y visitantes a denunciar ese problema.
El proyecto prevé concienciar a los brasileños y turistas de que la violencia sexual es un delito, informó hoy la Comisión Europea (CE) en un comunicado.
Para ello, se han organizado seminarios de formación para gestores públicos brasileños y debates sobre este tema en cada una de las doce ciudades que albergan partidos del campeonato, además de que se realizarán iniciativas para que las víctimas conozcan sus derechos y se reforzará el apoyo contra la explotación sexual en el país.
La UE quiere insistir sobre todo en el compromiso ciudadano para denunciar estos abusos a través de una amplia campaña de promoción del teléfono de atención gratuito “100”, a través del cual todo aquel que conozca un caso de explotación sexual de menores podrá denunciarlo.
El comisario europeo de Desarrollo, Andris Piebalgs, afirmó que “Brasil dispone de una ocasión única para dar a conocer su extraordinario desarrollo, con cerca de 40 millones de personas que han logrado salir de la pobreza en los últimos 10 años”.
Agregó que “algunas partes de la sociedad brasileña todavía no disfrutan de derechos humanos que nosotros (europeos) damos por descontados”.
La campaña, organizada por la Delegación de la UE en Brasil, se desarrolla en más de 15 países gracias a la colaboración con la red ECPAT (Acabar con la Prostitución, Pornografía y Tráfico de Menores) y a ella se han sumado los alcaldes de las doce ciudades brasileñas donde se celebrarán partidos del Mundial.
Además, famosos futbolistas brasileños como Kaká o Juninho Pernambucano se han unido a la iniciativa.
El objetivo final es que los niños estén protegidos de cara a los eventos mundiales que acogerá el país, que en 2016 será también sede de los Juegos Olímpicos.
Esta campaña se suma a los proyectos de apoyo de los derechos humanos que la UE viene desarrollando en las ciudades sede del campeonato.
En el estado de Paríba, por ejemplo, se desarrolla un programa para proteger a las mujeres frente a la violencia, formándoles en temas de género y para la participación política, en tanto que en Salvador De Bahía la actuación comunitaria se centra en combatir los problemas de violencia doméstica, abusos sexuales y robo que afectan a niños y adolescentes.
Además, en varias zonas la UE desempeña programas de asistencia jurídica a diferentes comunidades indígenas para que puedan defender en los tribunales sus derechos territoriales.