Por Amalia del Cid
Cinco veces se presentó Maritza Rivas en el casting de Canal 2, “la quinta fue la vencida” y ahora alegra las mañanas del público de Primera Hora. Está casada y tiene una niña de 2 años, es licenciada en Gestión y Desarrollo del Turismo, por una justa razón le tiene miedo a los perros grandes y no olvida su mayor “trágame tierra” en televisión.
::: Un recuerdo de infancia.
Cuando jugaba futbol en las calles de la cuadra. Empecé desde los 5 o 6 años.
::: ¿Buena en futbol?
Ya no. Jugué hasta Primera División con la UCA. Fui becada por deporte y excelencia académica.
::: ¿Cuál es tu sueño más loco?
Ser una actriz famosa. De telenovelas y películas.
::: ¿Tu vicio?
(Ríe) Dormir. ¡Me fascina! Cuando no lo hago tengo un muy mal humor.
::: ¿Y tu apodo?
“Flaca”, “Mayi”, “Mari”, “Maritcita”. Cuando era chiquita me decían “Piolín” (ríe).
::: ¿Tu mayor defecto?
Que soy resentida, rencorosa. Toda la vida he sufrido por eso.
::: ¿Has tenido algún “trágame tierra” en televisión?
Uhhh… Montones. Creo que diario (ríe).
::: ¿El mayor?
Recientemente, en el primer partido del Mundial, dije: “¿Será que este partido se va a definir en tiempo extra?” Me refería al tiempo complementario, pero por el estrés de la primera transmisión, confundí los términos. Ahí sentí lo más horrible. Es lo peor que me ha pasado (ríe).
::: ¿Tenés algún trauma?
No me gustan los perros grandes. Me dan miedo. Tengo un montón de puntadas en los pies.
::: ¿Cuántos perros te mordieron?
¡El mismo perro me mordió tres veces! Y dos veces me mandó al hospital. Una me hicieron cuatro puntadas; la otra siete.
::: ¿Y de quién era el perro?
De un exnovio. (Carcajada) ¡Nunca se me va a olvidar!
::: ¿Sos vanidosa?
Súper vanidosa. Pero yo sé que algún día me voy a volver viejita, arrugadita y trato de enfocarme más en el corazoncito.
::: ¿Es cierto que la belleza duele?
No duele, pero toma tiempo (ríe).
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