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Lucía Navas
El Gobierno enfrenta un problema para sostener el gasto en 2014, debido a que capta menos impuestos de lo que calculó. Si bien el asesor presidencial para asuntos económicos, Bayardo Arce, prometió esta semana que el recorte del Presupuesto General de la República que preparan afectará “lo menos posible” las áreas sociales y la inversión pública, esto parece estar en duda.
Y es que el crecimiento de la recaudación fiscal se enfría cada mes. En mayo pasado se recaudó 3,437 millones de córdobas (unos 134 millones de dólares). Ese monto es el segundo más bajo en el año. Febrero fue el mes que menos ingresos ha recibido el Gobierno, con 3,432.5 millones de córdobas.
Lo acumulado entre enero y mayo en total suman 21,349.2 millones de córdobas (unos 833.9 millones de dólares), indican las estadísticas del Banco Central de Nicaragua (BCN).
“No hay ningún bloqueo a la reforma a la Ley Tributaria, es un tema que ha sido consensuado”, dijo Aguerri.
Afirmó que estaba previsto que en 2013 y 2014 la recaudación bajara por los cambios que trajo la nueva LCT.
“Habrían disminuciones considerables, por ampliar el techo (al salario exonerado del IR) a los trabajadores, explicamos que se estaban reduciendo las partidas del ISC de manera significativa”, dijo Aguerri.
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Se trata de una cifra desalentadora, porque según el economista Adolfo Acevedo, es un crecimiento por debajo de lo que requiere el Gobierno para sostener el techo del gasto presupuestario total previsto en 55,781 millones de córdobas (unos 2,178.9 millones de dólares). Se requiere crecer 18.6 por ciento.
Pero la recaudación acumulada creció 14.3 por ciento en relación con mayo de 2013. Fue un retroceso, debido a que en el primer cuatrimestre del actual año el crecimiento fue 15.9 por ciento. De hecho, en el primer trimestre el repunte acumulado fue de 22.6 por ciento.
Oficialmente el Ministerio de Hacienda y Crédito Público (MHCP) estimó que los ingresos tributarios crecieran en el año 15.9 por ciento y captar 48,265.2 millones de córdobas (1,885.3 millones de dólares).
Pero debido a que en 2013 tampoco se cumplió la meta de recaudación y se ha enfriado el crecimiento de las recaudaciones, tanto Acevedo como el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp) indican que en 2014 se requiere que los impuestos crezcan 18.6 por ciento, para lograr los 55,781 millones de córdobas que espera el Gobierno.
SIGUE DESMEJORA DEL ISC
El peso fundamental de la desaceleración recae en el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC), el que cayó 0.3 por ciento a mayo.
Acevedo indica que el problema es la gran brecha entre la tasa de crecimiento proyectada del ISC sobre las importaciones, que era del 51.6 por ciento, y la tasa efectiva de su comportamiento al caer este impuesto 21.4 por ciento, “lo cual pone de manifiesto un error de proyección bastante grueso y difícil de explicar”.
“La recaudación del IR (Impuesto sobre la Renta) muestra un crecimiento interanual del 24.8 por ciento, similar a la tasa proyectada para todo el año, que es de 24.2 por ciento. Sin embargo, debe indicarse que esta tasa implica una desaceleración respecto a las observadas en el primer trimestre, que fueron superiores al 36 por ciento interanual”, indica Acevedo.
La aceleración del primer trimestre fue principalmente por la liquidación y pago del IR en marzo. Acevedo resta credibilidad a que el Gobierno señale que los problemas causados por la sequía sean razón fundamental “porque la agricultura solo representa el 2.6 por ciento de la recaudación”.
“Es más creíble que dicha desaceleración obedezca al derrumbe en las tasas interanuales de crecimiento de la actividad de la construcción, asociado a la caída en el componente de construcción de la inversión privada”, sustenta.
También influye la brecha en la industria fiscal, que según el economista se explica porque la recaudación sobre cigarrillos y productos del tabaco ya no se registra en ese segmento.
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