Elízabeth Romero
De acuerdo con fuentes extraoficiales, desde hace unos ocho días “Cobra”, un desmovilizado de la Resistencia Nicaragüense (Contra), está detenido en las celdas de El Chipote, en Managua.
“Cobra” es visto como uno de los líderes que integra grupos armados con fines políticos, sin embargo, supuestamente la Policía lo sacó de una de las comunidades del norte y aparentemente lo ha utilizado para que delate a exmiembros de la Resistencia.
El Cenidh señala en una publicación escrita que tanto en Managua como en Matagalpa, ha recibido denuncias de al menos una treintena de familiares de los detenidos.
El organismo indica que aunque ha recurrido ante las autoridades policiales de la DAJ con el propósito de obtener información sobre el paradero de los detenidos, no les han proporcionado información.
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Uno de los desmovilizados de la Contra dijo que “Cobra” también es conocido como “El Caminante”. A este aparentemente le atribuyen la participación en los hechos ocurridos en el kilómetro 76, Carretera Panamericana Norte, donde perecieron cuatro personas que viajaban en la caravana de simpatizantes orteguistas que regresaban de la Plaza La Fe.
VOCERO POLICIAL DICENO SABER DE “COBRA”
LA PRENSA consultó al vocero policial, comisionado mayor Fernando Borge, en relación con esta detención, pero alegó desconocer este tipo de información. “¿Cobra”? no sé, no tengo información… en este momento yo no”, dijo Borge.
Mientras la jefa de facto de la Policía Nacional, primera comisionada Aminta Granera, únicamente se refirió a que continúan con las investigaciones sobre la masacre y que ofrecerán una conferencia.
NADIE HABLA DE DETENIDOS
Es de destacar que las autoridades no han aceptado tener en su poder a las personas cuyos familiares han denunciado en los organismos de derechos humanos que fueron sacados de sus viviendas y por tanto, han sido considerados “desaparecidos”.
En cuanto a la cantidad de detenidos por las investigaciones en relación con la masacre del 19 de julio, el vocero policial señaló: “No tengo ese dato”.
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), contabilizó que entre el 26 y el 28 de julio, la Policía Nacional y el Ejército de Nicaragua con uso excesivo de la fuerza realizaron 11 allanamientos en Ciudad Darío, San Isidro y San Ramón de Matagalpa.
Además las detenciones fueron sin orden judicial, lo que violentó las garantías constitucionales y procesales de los capturados y ahora “desaparecidos”.
El Cenidh menciona que esta situación deja en evidencia una clara violación a la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas de la Organización de Estados Americanos (OEA), de la cual Nicaragua es suscriptora.
(Colaboración Melissa Aguilera).
Ver en la versión impresa las páginas: 8 A ,1 A
