Aun cuando los equipos que saltan al escenario hoy no disponen de brazos como los de Julio Moya, Epifanio Pérez u Oswaldo Mairena, no solo capaces de provocar temor en el corazón de su adversario, sino también prestos a trabajar diario y cargar con sus equipos, tanto Bóer como la Costa no van mancos a la batalla por la cima del beisbol nacional.
Prueba de ello son los abridores de hoy: Róger Marín (Bóer) y Elvin García (Costa), dos brazos competentes, listos para intentar frenar al explosivo ataque costeño y la precisa ofensiva india, en el inicio de la Final del beisbol nacional. He aquí un vistazo a algunos detalles de estos carabineros que hoy suben al box, intentando alcanzar las estrellas.
RÓGER MARÍN, 34 AÑOS
Debutó en Primera División en el 2001 con el Estelí, pero fue al año siguiente, con Granada, cuando insinuó que tenía posibilidades de ser alguien como lanzador. Tuvo 7-5 y 3.06. Tras un breve paso por el beisbol rentado con los Filis regresó al país y en los equipos en que ha militado ha sido un brazo importante, aunque su mejor etapa la vive ahora con el Bóer.
DETALLE
Lanzador agresivo, ataca la zona de strikes y trata de tomar ventaja temprano en el conteo. Dispone de experiencia y fortaleza temperamental para sortear la presión y sobreponerse a las emociones de una Final. Luego de la salida de Álvaro López, emergió como el sustituto natural para liderar el staff del Bóer. Es muy competitivo. Quiere completar cada juego.
RECURSOS
Dispone de una recta que puede llegar hasta noventa millas, pero su average es 87. También tira una curva de amplia rotación, pero su arma es su forkball (bola de tenedor) que después de contonearse en el camino, se desploma al aproximarse al home. Con ella poncha o provoca rolas por el piso. Lanza bajo y mezcla bien. Este año no permitió jonrones en 133.1 innings.
LIMITACIONES
Usa muchos picheos y con cierta frecuencia sufre ataques repentinos de descontrol. Y aun cuando logra salirse él solo de los problemas, se va desgastando en exceso, lo que le priva de caminar profundo en los partidos. Cuando lo atacan temprano, pasa apuros para frenar al oponente e imponer su patrón. Pero si no lo cazan al inicio, prepárense para verlo brillar.
ELVIN GARCÍA, 24 AÑOS
Al igual que Marín, debutó con Estelí, pero tuvo un mejor despegue en el 2009, con 8-5 y 1.82. También militó en el beisbol profesional con los Bravos, con quienes registró 13-6 y 2.29 en tres campañas. Este 2014 ha sido su mejor año y su versatilidad para desempeñarse en el doble rol de abrir y relevar, lo hace un brazo clave en las aspiraciones costeñas.
DETALLE
Para quienes dudaban sobre su firmeza emocional, tras explotar en el primer partido de la semifinal ante Matagalpa, el resto de la serie sirvió para ser exhibido de cuerpo entero, con una recta que flirtea con las noventa millas, pero que además sabe cómo usarla. Es también muy agresivo y le encanta lanzar adentro. Aún está en construcción, pero ya es alguien real.
RECURSOS
Puede hacer llegar su recta a noventa millas y la lanza sin temor a la zona interior del plato. Su cambio (circle change) es un buen disparo secundario, pero su mejor complemento es su curva. Dispone de mejor control que Marín y aunque emplea menos picheos, acumuló una notable frecuencia ponchadora: 135 “fusilados” en 132.2 innings. Es un gran competidor.
LIMITACIONES
Como aún no se le ha visto sobre el escenario de una Final hay quienes están expectantes de cuál será su reacción en este nuevo contexto, es decir, la interrogante no es con respecto a su habilidad, sino su estabilidad. Tira más strikes que Róger, pero cuando se afecta su control, que no es a menudo, es mejor llevárselo. Batalla al inicio, pero si entra en ritmo, es difícil.
Ver en la versión impresa las páginas: 11 B