Estados Unidos/AFP
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, declaró este lunes estar “muy inquieto” por la decisión israelí de apropiarse 400 hectáreas de tierras en Cisjordania, en represalia por los hechos que desencadenaron el conflicto en Gaza.
Ban, citado por su portavoz, recordó que para Naciones Unidas la colonización es “ilegal bajo las leyes internacionales” y obstaculiza una posible solución de dos Estados para resolver el problema palestino-israelí.
Además, añadió, “tomar una gran proporción de tierra podría abrir camino hacia la construcción de más asentamientos”. Ban pidió a Israel “tener en cuenta los llamados de la comunidad internacional, abstenerse de toda actividad de colonización y respetar sus compromisos” internacionales.
Israel decidió declarar propiedad del Estado 400 hectáreas cercanas a la colonia de Gva'ot, cerca de Belén, en represalia por la muerte de tres adolescentes israelíes en junio en ese sector, informó el ejército en un comunicado, precisando que las partes involucradas tienen un plazo de 45 días para apelar la decisión.