La incidencia de la empresa privada en la aprobación de las leyes de Nicaragua no es bien vista por los diputados opositores Carlos Langrand y Víctor Hugo Tinoco, quienes opinan que a través de los acuerdos con el Gobierno, el sector empresarial ha logrado acomodar las leyes a sus intereses, mientras se hacen de la vista gorda ante la falta de institucionalidad.
El diputado opositor Carlos Langrand opinó ayer que por más que el sector empresarial se pronuncie a favor de la institucionalidad del país, ese es un tema que realmente no les interesa y asegura que los diputados opositores se han quedado solos en la lucha por la sobrevivencia del Estado mismo y por la independencia de los poderes del Estado.
El diputado Langrand explicó que ante la incapacidad del Gobierno de generar más de noventa mil empleos anuales, que el sector privado sí puede ofrecer, es aquí donde empieza el matrimonio (estado-empresas), porque el Gobierno les da las leyes para que se desarrolle la empresa privada, pero obviamente a cambio de hacerse de la vista gorda ante los graves problemas que tiene la institucionalidad.
DESPRECIO A DIPUTADOS
Por otra parte, el diputado Langrand dijo que la empresa privada proyecta un desprecio por los diputados opositores.
(La empresa privada) De forma irónica y sarcástica desprecia el trabajo de los partidos políticos cuando dicen que ellos, como empresarios, han logrado la aprobación de ochenta leyes y los diputados opositores ninguna, recordó Langrand.
GARANTIZAN A ORTEGAEL PODER
Langrand también opinó que el estilo de gobierno del presidente inconstitucional Daniel Ortega implica hacer alianzas con sectores que le garantizan una permanencia ilegal en el poder. Los sectores que han apoyado para que Daniel Ortega permanezca en el poder son principalmente los sectores altos de las empresas privadas, afirmó Langrand, agregando que las leyes deben aprobarse con el consenso de los ciudadanos.
El diputado opositor Víctor Hugo Tinoco opinó que el Estado ha tenido que acomodar las leyes del país a los acuerdos que hacen con los sectores que él denomina del gran capital.
El Gobierno y el gran capital se autoprotegen, se autoapoyan, se recetan las concesiones y le suben los impuestos a la clase media, porque a los pobres saben que no les pueden sacar más, expresó Tinoco, diputado del Movimiento Renovador Sandinista (MRS).
En cuanto a la institucionalidad, Tinoco manifestó que aunque el sector privado respalde la institucionalidad, se pronuncie y demande el respeto a esta, sin embargo, no están dispuestos a dar una batalla por la democracia, ni van a poner en riesgo su alianza con el gobierno orteguista.
Por su parte, el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Adán Aguerri, acepta que el sector empresarial tiene incidencia en la aprobación de las leyes, porque hacen el trabajo que les corresponde hacer a la clase política. Al final nos ha tocado a nosotros hacer ese trabajo y nosotros sí tenemos la capacidad, indicó Aguerri, en alusión al conocimiento de las leyes que se aprueban en el país.
Aguerri invitó a los diputados a sentarse con el Cosep para discutir las leyes que se han aprobado con el consenso del sector privado.
El presidente del Cosep también aclaró que no están interviniendo en el espacio de los diputados, sino ofreciendo su posición sobre leyes que los diputados aprueban para uso de las empresas.
Las leyes que se votan donde nosotros estamos planteando nuestros temas son leyes que vienen a ser utilizadas por las empresas, no por los diputados, explicó Aguerri, consultado ayer vía telefónica.
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