En el armario masculino suelen haber más colores neutros y básicos que cualquier otro color, una excelente costumbre para lograr un armario inteligente que nos saque de cualquier apuro. Pero ¿sabés cuántas opciones tienen para combinarlos?
El azul es uno de los colores que deben prevalecer en todas sus tonalidades por ser uno de los más versátiles y por lucir tanto con otros colores neutros como los marrones, cremas, blanco o grises, como con los no neutros como el rojo, rosado, púrpura, violeta, amarillo y naranja.
El color gris es el mejor reemplazo para el negro y es además más versátil ya que es muy elegante y favorecedor tanto de día como de noche. Luce con todos los tonos de su misma gama de color y con otros básicos como el marrón claro, azul, cámel, verde pino, blancos, negro y azul petróleo. Fuera de los básicos luce con todo el resto: corales, rosados, burdeos, vino, morados, amarillos, turquesas, rojos, naranjas.
El color negro luce en combinación con casi todos los colores pero se debe evitar vestirlo con otros muy oscuros y parecidos como el gris carbón, marrón oscuro, azul oscuro y verde oscuro. En países tropicales es mejor evitar atuendos completos en este color a menos que le combinemos tonos pasteles, vivos o suaves que le aporten luz.
El color marrón es uno de los más difíciles de combinar pero de los imprescindibles en tu armario, así que, si te gusta, llevalo con tonos claros como los blancos, cámel, rojos, dorados, cobres, verdes, tonos pasteles, azules claros o vivos, corales y naranjas. Resulta ideal para complementos y accesorios.
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