Las siamesas unidas por el tórax que nacieron en el estatal hospital de San Pedro Sula, norte de Honduras, comparten el corazón y el hígado, afirmó el neonatólogo del nosocomio, Samuel Santos.
Las niñas fueron sometidas a varios exámenes que confirman que “comparten corazón e hígado”, indicó Santos a periodistas.
Agregó que una de las bebés, que nacieron mediante una operación de cesárea en el Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, presenta “una malformación compleja cardíaca”.
El especialista señaló que el estado de salud de las niñas “es estable, pese a la malformación, se les puso líquidos intravenosos para alimentarlas y oxígeno, aunque respiran sin ayuda”.
Santos precisó que el corazón compartido entre las siamesas hace “imposible” su separación y añadió que “todavía no se puede determinar la probabilidad de vida” de las pequeñas, que pesaron juntas un poco menos de 3 kilos al nacer.
El padre de las niñas, Alex Alberto Ortega, pidió ayuda al presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, para salvar a sus hijas.
“Por favor señor presidente le pido que me apoye y me ayude a salvar a mis hijas; como padre estoy en la obligación de hacer lo que sea necesario para poder garantizarles la vida. Ellas son unos angelitos que no merecen lo que están pasando”, dijo Ortega en declaraciones a periodistas.
Ortega, de 27 años, y su esposa, Johana Anariba, de 23 años, son originarios del departamento central de Comayagua, donde se dedican al cultivo de café.
Este es el sexto caso de siamesas que se registra en Honduras desde 2010, según fuentes médicas.
En septiembre pasado nacieron dos niñas unidas por el tórax y murieron 24 días después de haber nacido tras agravarse una deficiencia cardíaca que sufrían.
En agosto y septiembre de 2013 hubo otros dos casos de siamesas también unidas por el abdomen y que igualmente fallecieron a los pocos días de haber nacido.
En 2011 nacieron dos niñas unidas por el tórax, que compartían el hígado, la pelvis y los riñones y murieron casi dos semanas después, mientras que en noviembre de 2010 hubo otro caso de siamesas unidas por el abdomen que fallecieron una semana después de haber nacido.