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Los asuntos de delincuencia común son de exclusiva misión de la Policía Nacional. Detener a presuntos delincuentes es un asunto exclusivo de la Policía”. Gonzalo Carrión, del Cenidh. LA PRENSA /ESQUIVEL

Cenidh: anómalo actuar del Ejército

El director jurídico del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Gonzalo Carrión, criticó la participación de tropas del Ejército junto con fuerzas de la Policía Nacional en un operativo conjunto realizado la semana pasada en la finca Tobobal, en Mulukukú.

El director jurídico del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Gonzalo Carrión, criticó la participación de tropas del Ejército junto con fuerzas de la Policía Nacional en un operativo conjunto realizado la semana pasada en la finca Tobobal, en Mulukukú.

Las críticas de Carrión fueron respecto a las declaraciones que hizo la Policía Nacional en su nota de prensa en la que afirmó que se trata de un operativo contra “grupos delincuenciales” que afecta a los pobladores de esa zona.

“Detener a presuntos delincuentes como ellos le llaman, o delincuentes comunes, es un asunto exclusivo de la Policía”, señaló el defensor de derechos humanos, quien estimó que “más allá del cuento de proteger la levantada de la cosecha de café confirma que operativos dan una respuesta militar a una situación que no es delincuencia común”, subrayó.

Insistió en que la participación del Ejército en esas operaciones, lo que hacen es confirmar lo que las autoridades han negado de forma reiterada “que se están enfrentando a grupos armados irregulares”.

Carrión señaló que tampoco tiene razón de ser que los militares hayan ocupado una finca como aseveraron en su momento los familiares de Juan Ernesto Lumbí, propietario de Tobobal, pues “no está legitimado, porque ese es un asunto de Policía y además tiene que ser sobre la base de una causa legal establecida”. Y aún si fuese la Policía, “la ocupación tiene que estar soportada legalmente, debe tener una autorización judicial”.

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