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Militares y policías vuelven a proteger transporte en Honduras por violencia

El jefe de operaciones de la Policía Militar, coronel Elías Melgar, dijo a periodistas que en Tegucigalpa se ha incrementado de 300 a 800 los efectivos militares y policiales para brindar protección a los usuarios y los chóferes dentro del transporte urbano por el aumento de crímenes contra ellos.

 

Efectivos de la Policía y el Ejército de Honduras volvieron a proteger el transporte urbano de Tegucigalpa ante la ola de violencia que azota a ese sector y que ha causado la muerte de al menos 60 personas este año, mientras que los transportistas anunciaron un paro para la próxima semana.

El jefe de operaciones de la Policía Militar, coronel Elías Melgar, dijo a periodistas que en Tegucigalpa se ha incrementado de 300 a 800 los efectivos militares y policiales para brindar protección a los usuarios y los chóferes dentro del transporte urbano por el aumento de crímenes contra ellos.

Agregó que la operación incluye la asignación de dos militares o policías en cada autobús con el propósito de reducir los índices de violencia que afecta al sector transporte, que en los últimos días han realizado paros parciales en las principales ciudades del país para exigir al Gobierno mayor protección.

Según cifras del estatal Comisionado de los Derechos Humanos, unas 60 personas han muerto este año en ataques contra el servicio de transporte público en Honduras, perpetrados en su mayoría por pandilleros que exigen el pago de extorsiones.

La operación inicio en Honduras al mismo tiempo que empresarios del transporte celebran una asamblea en la ciudad de Siguatepeque, al norte de la capital hondureña, donde anunciaron un paro a nivel nacional para la próxima semana.

“Estaríamos paralizándonos unas 50.000 unidades a nivel nacional la próxima semana”, declaró a periodistas el portavoz del Sindicato del Transporte Urbano de Honduras, Jorge Lanza, al concluir la reunión.
Destacó que los transportistas “no están en contra del Gobierno, sino en contra de que no nos dan la seguridad” en los autobuses.

El dirigente del transporte urbano de Tegucigalpa, Marvin Galo, por su parte, afirmó a periodistas que la próxima semana paralizarán la unidades en protesta contra “la falta de protección” al servicio de transporte público.

“La gente está indignada, todos estamos muy molestos, con un mal sabor de boca, son vidas humanas las que se están perdiendo” en los ataques contra el servicio de transporte, subrayó Galo.

El anunció coincidió con la muerte violenta de un chófer de autobús, identificado como Ismael Núñez, de 23 años, en la ciudad caribeña de La Ceiba.

Núñez fue asesinado por dos hombres armados que abordaron el autobús en una avenida de La Ceiba y pocas calles más adelante lo bajaron de la unidad y le dispararon sin mediar palabra, según un informe policial.

Autoridades hondureñas y organismos de derechos humanos han señalado que la mayoría de los crímenes contra transportistas tienen vínculos con las pandillas que extorsionan a chóferes y empresarios del servicio de transporte, a cambio de no asesinarlos.

Internacionales Honduras Transporte violencia archivo

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